Deprecated: Assigning the return value of new by reference is deprecated in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-settings.php on line 520

Deprecated: Assigning the return value of new by reference is deprecated in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-settings.php on line 535

Deprecated: Assigning the return value of new by reference is deprecated in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-settings.php on line 542

Deprecated: Assigning the return value of new by reference is deprecated in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-settings.php on line 578

Deprecated: Function set_magic_quotes_runtime() is deprecated in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-settings.php on line 18

Strict Standards: Declaration of Walker_Page::start_lvl() should be compatible with Walker::start_lvl(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1199

Strict Standards: Declaration of Walker_Page::end_lvl() should be compatible with Walker::end_lvl(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1199

Strict Standards: Declaration of Walker_Page::start_el() should be compatible with Walker::start_el(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1199

Strict Standards: Declaration of Walker_Page::end_el() should be compatible with Walker::end_el(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1199

Strict Standards: Declaration of Walker_PageDropdown::start_el() should be compatible with Walker::start_el(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1244

Strict Standards: Declaration of Walker_Category::start_lvl() should be compatible with Walker::start_lvl(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1391

Strict Standards: Declaration of Walker_Category::end_lvl() should be compatible with Walker::end_lvl(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1391

Strict Standards: Declaration of Walker_Category::start_el() should be compatible with Walker::start_el(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1391

Strict Standards: Declaration of Walker_Category::end_el() should be compatible with Walker::end_el(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1391

Strict Standards: Declaration of Walker_CategoryDropdown::start_el() should be compatible with Walker::start_el(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/classes.php on line 1442

Strict Standards: Redefining already defined constructor for class wpdb in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/wp-db.php on line 306

Strict Standards: Redefining already defined constructor for class WP_Object_Cache in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/cache.php on line 431

Strict Standards: Declaration of Walker_Comment::start_lvl() should be compatible with Walker::start_lvl(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/comment-template.php on line 1266

Strict Standards: Declaration of Walker_Comment::end_lvl() should be compatible with Walker::end_lvl(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/comment-template.php on line 1266

Strict Standards: Declaration of Walker_Comment::start_el() should be compatible with Walker::start_el(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/comment-template.php on line 1266

Strict Standards: Declaration of Walker_Comment::end_el() should be compatible with Walker::end_el(&$output) in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/comment-template.php on line 1266

Strict Standards: Redefining already defined constructor for class WP_Dependencies in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/class.wp-dependencies.php on line 31

Strict Standards: Redefining already defined constructor for class WP_Http in /home/asociacion/domains/argra.org.ar/public_html/web/enrp/wp-includes/http.php on line 61
1º Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos » Talleres y Mesas DESGRABADOS

Categoría: Talleres y Mesas DESGRABADOS

DESGRABADO DE LA MESA DE DEBATE “Fototeca - ANM”

Convenio Fototeca/ARGRA - ANM (Archivo Nacional de la Memoria) *.

Daniel Vides: Por un convenio que tenemos con el archivo desde el año 2005 ARGRA está funcionando en la ESMA desde el 2008. La Fototeca está básicamente compuesta con los fondos que provienen del material que los socios envían para la Muestra Anual y de las donaciones o recuperaciones de archivos que se han hecho. Tenemos el archivo de Ámbito Financiero que ha sido donado, parte del archivo del viejo Cronista, parte del viejo Tiempo Argentino, que ha sido recuperado de un volquete en la calle, y parte del archivo de papel de Página 12 que fue donado por el mismo diario. Eso es así como el volumen más grande de material que tiene la fototeca. Catalogado y colgado en la página web tiene una parte muy pequeña de este archivo, unas 2 mil imágenes, y estamos en plan de seguir catalogando y organizando el material. Es todo un desafío en cuanto a la organización, es una cantidad de cuestiones que hacen funcionar a una Fototeca .

Acá tenemos a Mariana Arruti que es la coordinadora del área audiovisual del Archivo Nacional de la Memoria, y a Martín Mujica, también del archivo. Ahora le vamos a pedir a Mariana que nos hable un poco del Archivo Nacional de la Memoria y cómo funciona.

Mariana Arruti: Para nosotros también es muy importante contar con los amigos de ARGRA en el Archivo. El Archivo se crea a fines de 2003, empieza a funcionar en 2004 por un decreto presidencial, y tiene como objetivo principal el relevamiento, la digitalización y la conservación de todos aquellos documentos en papel fotográfico o audiovisuales que estén relacionados con la represión del Estado hacia la sociedad civil, y también con las respuestas que ha dado el pueblo a esos periodos represivos en nuestro país. El Área Audiovisual es sólo una de las áreas del Archivo, y como decía Daniel, estamos funcionando en lo que era la ESMA, que hoy es un lugar que se llama Espacio para la Memoria y la Defensa de los Derechos Humanos. Se creó también un área de investigación, de prensa, de difusión, de relevamiento de archivos en papel, la CONADEP también formó parte en ese diseño cuando el Archivo se crea, una parte importante de los acervos que tiene el Archivo Nacional de la Memoria”.

Durante estos años fuimos atravesando un proceso que también implicó la recuperación de espacios físicos, entre ellos el de la ESMA. Un poco también acompañando la recuperación de otros espacios físicos, de otros sitios de memoria, y en ese marco también se crea la Red Federal de Sitios de Memoria, que en este momento está señalizando todos los lugares que funcionaron como Centros Clandestinos de Detención a lo largo y ancho del país. La ESMA, como lugar emblemático en este sentido, es importante y nosotros estamos funcionando allí”.

El convenio con ARGRA fue el segundo que firmamos. Cuando empezamos a funcionar firmamos el primero con el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, y en el 2005, cuando la Asociación estaba a cargo Gonzalo Martínez, firmamos el Convenio Marco con la Asociación, y en el 2008 firmamos el segundo, que fue ya como dijo Martín “el acta matrimonial definitiva”, cuando ya los compañeros mudaron las instalaciones de la Fototeca al archivo. El Área Audiovisual básicamente tiene como dos patas importantes: una tiene que ver con los relevamientos de material audiovisual y fotográfico, y otra parte tiene que ver con la producción de materiales.

Nosotros no somos “archivistas”, no estamos formados como “archivistas”, pero en los últimos años hemos ido aprendiendo esta cuestión, pero estamos en el Área con una sensibilización particular, por un lado la temática, porque todos hemos hecho cosas antes de estar en el Área Audiovisual vinculadas con los derechos humanos, pero también nos preocupa la difusión, ya que venimos de la fotografía y el cine básicamente. En este sentido, no sólo relevamos material y tratamos de ponerlo en valor, colaborar con algunos archivos con la digitalización, en la guarda de ese material y crear un archivo, sino que pensamos que es importante la producción de videos institucionales y de muestras fotográficas, por ejemplo, que permitan que ese material se conozca y no solamente que esté a disposición de investigadores. Sino de alguna manera, salir a la calle con ese material en forma, por ejemplo, de muestras fotográficas. Y en este sentido hemos producido dos o tres muestras importantes que han recorrido el país: una de ellas se llama “De la Ley de Residencia al Terrorismo de Estado”, que es una muestra que intenta recuperar esta historia de los periodos represivos y las respuestas de la sociedad civil a lo largo del siglo XX en nuestro país, y es una muestra que recorrió muchísimas provincias y lugares pequeñitos de la nación llevando este material. En ese caso gran parte del material está conformado, en gran parte, por el Archivo General de la Nación hasta mediados de siglo más o menos, y luego hay fotos que vinieron de la fototeca de ARGRA de autores, hay otras que vinieron del Archivo de Clarín, de Crónica y de colecciones particulares que algunos autores nos han facilitado para que nosotros podamos tener en el Archivo colecciones, también de autores particulares.

Para hacer estos trabajos básicamente hemos hecho convenios con artistas y distintas instituciones. En Cordoba, por ejemplo, tienen un lugar muy interesante donde están recuperando todo el material audiovisual de lo que era el viejo Canal 10 de TV, y ahora el Canal 12 que pertenecía a ARTEAR, y lo tienen ellos y están digitalizando todas las imágenes que se han visto en ese momento histórico, y luego han quedado en un cajón y nunca más volvieron a verse. El Archivo de Córdoba que pertenece a la Universidad está haciendo un trabajo importante con ese material, nosotros tenemos convenio con ellos, y no funcionamos tan cercanamente como con ARGRA, pero tenemos a disposición la posibilidad de solicitar material y de tener colecciones propias de lo que es ese archivo de la Universidad. Firmamos recientemente un convenio con Télam, también estamos haciendo allí un relevamiento interesante, y también por ejemplo tenemos convenio con la Universidad de Buenos Aires (UBA). En conjunto con la UBA hemos hecho una muestra este año con el Archivo de Palabras e Imágenes de Mujeres (APIM) que pertenece a Filosofía y Letras de la UBA, y con ellos hemos armado una muestra sobre “Mujeres y Política. Trabajos, Derechos” que también está empezando a itinerar en este momento.

Quería comentarles una experiencia que nos resultó muy interesante que hicimos el año pasado con el Archivo del Diario Jornada de Chubut, particularmente en lo personal, fue muy importante para mí ese trabajo porque venía de hacer una película sobre la Masacre de Trelew, y encontrarme con imágenes de ese diario que en ese momento cuando había hecho la película no había visto, me impactó mucho. Realmente la calidad del material es impresionante, tiene una cantidad de imágenes muy valiosas que nunca habían sido vistas, es un archivo que está muy ordenado, está en muy buenas condiciones, pero es un archivo que no estaba digitalizado y que no estaba puesto en valor, no estaba siendo posible de ser utilizado por nadie. En ese marco, el Diario Jornada con el Ministerio de Gobierno de la Provincia se arma el convenio, y la Subsecretaria de Derechos Humanos Provincial está dentro del Ministerio de Gobierno y firman un convenio. Allí entró el Archivo Nacional de la Memoria como un asesor técnico digamos, o sea nosotros, el Área Audiovisual del Archivo. Desde enero de 2010 hasta enero de este año hemos estado trabajando con la Subsecretaria de Derechos Humanos de la Provincia para rescatar ese material, digitalizarlo, ponerlo en valor, indexarlo, y también empezar a llenar de contenido esas imágenes.

Lo importante de rescatar estos archivos, que a veces están en los diarios tirados y en mal estado, es que el tiempo pasa y las imágenes tienen personajes que no sabemos quienes son. Entonces el trabajo no es solamente rescatar ese material, buscar a sus autores, identificar quiénes son, sino además saber quiénes son esas personas que están en esas imágenes. En este momento por ejemplo en Chubut, la Subsecretaría está trabajando con algunos referentes de la provincia para poder determinar quiénes son esas personas que están en esas imágenes. Además entra la comunidad a construir la posibilidad de poner en valor un archivo como este. Les cuento esta experiencia porque para nosotros estar acá hoy en este encuentro es muy importante también en los aspectos de invitarlos, es decir un poco la idea que teníamos con Daniel y con Martín era decirles que el archivo tiene las puertas abiertas para colaborar en proyectos con una gran diversidad, que pueden tener distintas características, el material puede ser contemplado su uso de manera en que cada uno lo crea conveniente, pero lo que básicamente buscamos es entrar en colaboración con aquellos que tengan ideas y materiales interesantes para rescatar, para valorizar, para digitalizar, para poner a disposición de uso y difusión. Es el momento para que nos contactemos por si hay dudas, inquietudes, o ganas de llevar adelante proyectos en conjunto”.

Martín Mujica: Yo quería agregar una cosa que es sobre un tema que ustedes deben saber mejor que nadie, que es que en nuestro país el tema “los archivos”, hay una cultura de saqueo, de abandono, de olvido. De tenerlos en una caja abandonados y tirados debajo de una cama o en alguna dependencia pública, que se ha transformado en una cultura en este país, y que en estas sucesivas gestiones de gobierno en las últimas décadas, tanto a nivel del Estado como a empresas de comunicación en las que la mayoría de ustedes trabajan, los archivos son muy poco cuidados y son saqueados, lo cual ha generado una cultura de olvido o de desmemoria de todo el patrimonio cultural guardado tanto en imágenes en movimiento como en fotografías, como en documentación. En este sentido, el Archivo Nacional de la Memoria intenta crear una política de Estado que revierta esa situación, o que a partir de ahí se empiece a revertir esta cultura del saqueo, del abandono o la destrucción de los archivos, que en última instancia es el patrimonio cultural de la historia política y social de nuestro país, en la que ustedes hacen un aporte invalorable con las fotografías que ustedes producen.

El Archivo Nacional de la Memoria está en construcción hoy en día, estamos recién empezando, creando vínculos, convenios, generando producciones propias, buscando armar y organizar lo mejor posible nuevas colecciones, tanto en lo que respecta el área de fotografía como el área audiovisual, incorporando nuevos trabajadores al área como para que el área vaya creciendo, se vaya capacitando, se vaya desarrollando. En este sentido es para nosotros todo un aprendizaje, por eso de alguna manera es un archivo no visible para la sociedad, y quizás mucho de ustedes no lo conocían, pero es importante abrir el vínculo con ARGRA, con todos los socios de ARGRA, nos interesa especialmente aquellos compañeros que trabajan en el Interior, porque queremos que no sea un archivo que sólo funcione en la Capital Federal, sino que quiere extender sus vínculos en el Interior. La experiencia en el Diario Jornada fue muy buena, y de alguna manera sirvió como homenaje a Emilser Pereyra, que fue uno de los fotógrafos que registró la escena de la conferencia de prensa de Trelew en 1972. Emilser Pereyra hizo una serie de fotos que recorrieron el mundo y nadie sabía quien era Emilser Pereyra, esas fotos habían aparecido como por arte de magia. Entonces para nosotros haber tenido la oportunidad de tener un convenio con Jornada, con el Gobierno de Chubut, rescatar ese archivo, ponerlo en valor, y hacer una muestra fotográfica que está paseando por el país, y de alguna manera reivindicarlo a Emilser Pereyra, para nosotros fue un orgullo, un logro importante. Queda abierta la invitación a los que anden por Buenos Aires a que se den una vuelta por el Archivo, al predio de lo que era la ESMA, a conocerlo, y estrechar vínculos con los compañeros que trabajan en los medios gráficos del Interior como para empezar a poder armar nuevas colecciones de fotos”.

MA: También en la Fototeca de ARGRA en este tiempo estamos aprendiendo mucho, compartiendo problemas y soluciones para ellos. Con Daniel, Ezequiel, Vero. El acervo de ARGRA y la Fototeca comienza a transformarse en un referente en lo que hace a fotografías e imágenes vinculadas con los derechos humanos. No sólo la Fototeca es un insumo para nosotros, para nuestras propias producciones, sino que además para las consultas públicas, que no son masivas, no todo el mundo conoce el Archivo, pero sin embargo recibimos todo el tiempo pedidos de cineastas, de gente que está por publicar un libro. Generalmente la gente que nos consulta son estudiantes, pibes que están empezando, haciendo una tesis, o queriendo publicar un libro o lo que fuere, y la Fototeca de ARGRA empieza a ser referente en ese sentido. Por supuesto está articulado por los compañeros que trabajan en la oficina de al lado de la nuestra, y son ellos quienes nos dan información de lo que hay allí, los que tramitan la autorización, los que tramitan el vínculo entre quien necesita ese material y los fotógrafos. Es importante también porque la Fototeca empieza a tener un acerbo relacionado con los derechos humanos que empieza a ser visible en el afuera, en el usuario, y esto a nosotros también nos da mucha alegría que así sea.

DV: La Fototeca funciona en el Archivo, pero ARGRA tiene sus oficinas donde está nuestro material y nuestro equipo de trabajo, y el laburo es cotidiano y codo a codo. Pero el material de ARGRA es suyo, lo maneja ARGRA, y ellos para lo que necesiten nos piden a nosotros y nosotros le decimos lo que hay y lo que puede servir para algún pedido puntual, siempre contactamos a los autores de las fotos y pedimos la autorización puntual para la actividad que sea. Esta es una de las partes más arduas del trabajo, contactar con fotógrafos, algunos colegas que ya no están trabajando, o que hemos perdido el contacto. Muchas veces pasa que nos llega material y no conocemos al autor, nos viene de un archivo y no sabemos quien fue el que sacó esa foto, entonces ahí ARGRA tiene un criterio que si las fotos son para fines no comerciales, para fines que tienen que ver con la divulgación de la problemática de los Derechos Humanos, lo cede con la restricción puntual de ese uso. Incluso han llegado pedidos comerciales y contactamos autores para que mantengan la relación que les parezca con el interesado en exhibir el material, que no es la función de la Fototeca, pero que cada tanto pasa en nuestra tarea cotidiana. Estaría bueno que todos tengamos en cuenta que existe la Fototeca, que está el Archivo de ARGRA, todos los que trabajamos en medios sabemos bien eso del maltrato de los archivos, el abandono de los mismos. La Fototeca ha conseguido fondos, como dije rescatados de volquetes. Estaría bueno que todos cuidáramos el acerbo de nuestro patrimonio como fotógrafos, que es valioso y que a veces nos cuesta en la práctica del día a día encontrar el valor que tiene nuestra producción.

Pascual Belvedere: Muchas gracias a todos los panelistas. Quiero agregar que a cargo de la Fototeca se encuentra Verónica Martínez, Ezequiel Torres y Daniel Vides.

* La mesa se realizó el viernes 8 de abril de 2011 en el marco del 1er Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapadmalal.

Desgrabación: Fabián Induti

DESGRABADO DE LA MESA “EL DERECHO DE AUTOR EN LA PRACTICA”

El derecho de autor en la práctica. Contenidos en la confección de una factura*

Pascual Belvedere: Ahora vamos a hacer algo relacionado con la actividad anterior, que es el tema del derecho de autor, un tema candente y pendiente. Tenemos un proyecto de Ley preparado para presentar en las dos Cámaras, y creo que este año va a ser central y esperamos que sea aprobada la ley que diseñó ARGRA para defender el Derecho de Autor de todos los trabajadores de la imagen. En el panel que sigue está Ezequiel Torres, y un especialista en el tema, que es el Flaco Ceppi, que es el que más sabe y que nos va a poder ayudar.

Ricardo Ceppi: Antes que nada quiero hacer una aclaración sobre el trabajo que están haciendo en la Fototeca. Se había hecho difusión sobre el Derecho de Autor para que cada fotógrafo se considerara el creador de una imagen. En esta segunda etapa, vamos a hablar sobre el Derecho Patrimonial, entonces la aclaración es muy simple: el Derecho Patrimonial incluye, tanto sea la venta como la autorización de su uso. O sea yo puedo autorizar el uso de una imagen delimitándola para el uso del Museo de la Memoria por mi propia decisión como autor, aclarando que “por esto no voy a recibir dinero” o “por esto sí voy a recibir dinero porque soy el autor”.

Ezequiel Torres: Quiero permitirme reflexionar un poco en relación a la mesa anterior. El trabajo que viene haciendo ARGRA en ese sentido, cuando dijo “ese sentido” me refiero a algo que empecé a descubrir cuando empezamos a trabajar en la organización del Encuentro que es la articulación y el desarrollo de una política fotográfica desde ARGRA. A medida que uno crece como fotógrafo y como ser humano, si su búsqueda tiene una profundidad que le permite ver todas esas facetas que forman el destino del que elegimos ser parte. Y entre todas esas capas que atraviesan, dos de las que resalto y creímos que hay que darle más profundidad tienen que ver con el derecho, y también con todo lo que va pegado a eso, cómo se juntan los puentes cuando antes hablaba Mariana entre archivo, usos, derechos, “aquí cedo mis derechos para publicarlos en forma gratuita”, etc. Estamos empezando a insinuar un criterio de política fotográfica. Me parece una cuestión central en el desarrollo de la Asociación, en el desarrollo integral de nosotros como fotógrafos, y hay que ir por ahí. Tenemos que ser concientes de lo que producimos, y a la vez reconocer estas otras capas que rodean y mundos que articulan la fotografía. En este caso lo que el Ricardo va a hablar tiene que ver con el Derecho Patrimonial que ejercemos sobre nuestras imágenes.

RC: Sería interesante tener un debate para ver cuáles son las dudas, por lo que si tienen que interrumpirme háganlo sin problemas. Comienzo con una anécdota. Una editorial que firma contrato con un escritor por una determinada obra, donde se pone el título y se aclaran todos los ítems que están autorizados, y los que no están aclarados no están autorizados. Vale aclarar que la ley que protege a los escritores es la misma que nos resguarda a nosotros, es la Ley 11.723. Autor: fulano de tal; título: tal; derechos cedidos no exclusivos; edición especial; Venezuela. Importe: x; paradero: x, término: única edición de diez mil ejemplares. Una autorización de uso de una agencia de noticias a una compañía de comunicación, que dice “A quien corresponda, tengo el agrado de… por la autorización de las reproducciones de dos fotografías de archivo (la agencia las tiene porque un colega nuestro las produjo) utilizando las mismas como elemento publicitario, para los siguientes usos y soportes: publicidades gráficas, publicidad en televisión, avisos en la vía pública, publicidades en internet, etc. La duración del contrato es solamente de seis meses, valor de uso 15 mil pesos”.

ET: Perdón Flaco, te interrumpo. Una empresa para la que trabajamos, que avasalla nuestros derechos y que dice que no tenemos derecho a cobrar por la reutilización de nuestras imágenes, vende las imágenes que nosotros producimos a 15 mil pesos para un uso comercial”.

RC: Un banco de imagen. El banco de imagen se nutre del trabajo nuestro, y generalmente les da porcentajes a quienes tienen convenio con ese banco de imagen. O puede ser que la empresa ponga fotos adentro del banco de imagen. La discriminación está dividida en uso, por ejemplo folletos, volantes, revistas especializadas, diarios del Interior, afiches, vía pública, gigantografías, afiches decorativos, etc. ¿Pero por cuánto tiempo? Un mes, tres meses, seis meses. ¿Y en qué valores? Depende. Con modelo un precio, sin modelo otro precio”.

ET: Las agencias que nos representan pueden tabular valores establecidos de mercado para cobrar por las fotos que tienen, que son nuestras.

RC: Porque el tema es así. Nosotros somos autores de las fotografías, y la misma Ley dice que la fotografía tiene tres derechos. Argentina tiene firmados convenios con la Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI), también tiene Brasil, Uruguay. En fin, esto no es sólo una problemática de Argentina. En todos los países del mundo existe una ley que protege a la fotografía, la literatura, a quienes producen música, arquitectos, etc. Básicamente la Ley tiene tres puntos fundamentales: los derechos morales, donde está el autor y siempre es reconocido como tal y eso no caduca; los derechos de imagen, a quien se fotografía tiene que estar de acuerdo con determinadas salvedades, una de ellas es el periodismo; y los derechos patrimoniales, de los cuales vamos a hablar ahora. ¿Cómo hago una factura?, sabiendo que la Ley me permite discriminar una factura, que no es ni más ni menos que un contrato, es donde cualquiera de ustedes como autor autoriza el uso del contenido de la imagen que ustedes produjeron. Autorizan y dan, de acuerdo a ese convenio que queda registrado en la factura, en ese pacto que es económico y patrimonial, donde puede ser cero como decía hoy, pero puede ser diez, veinte, o cien, es donde dos personas combinan un precio para un uso, y se delimita eso. Lo que quiero explicar cuáles son esas delimitaciones.

Vemos que la factura empieza diciendo “Por autorización de uso”. “Autorización de uso” no es “vendo”, porque cuando yo “vendo”, el que compra se queda con la posibilidad de hacer lo que quiere con eso. Se considera que a la obra se le autoriza el uso porque es como si fuera el alquiler de un departamento. Si yo alquilo un departamento tiene un tiempo, un precio, pero el departamento cuando se termina ese contrato vuelve a mí. Entonces, es conveniente tener el encabezado “autorización de uso” en lugar de “vendo”. Todo autor tiene derecho a proteger su obra. Pero entonces yo autorizo el uso, ¿lo autorizo en exclusividad o sin exclusividad? Si lo autorizo en exclusividad, yo ya no puedo, en el periodo que esté pactado, hacer uso de esa obra. En cambio, si la autorizo sin exclusividad, mientras están usando la obra en este libro o en esta revista, también puedo ir a otro libro o revista para que se use. ¿Cuáles son las diferencias? Si es en exclusividad yo voy a pedir un mayor precio, porque me está restringiendo la posibilidad a mí de tener mayores beneficios económicos. Si es sin exclusividad, el precio puede llegar a bajar porque a mí me permite la multiplicidad de autorizaciones. Son variables que, bien administradas, mejoran nuestros réditos o beneficios .

Yo vengo hace rato haciendo trabajos de edición, y me cuesta mucho encontrar fotógrafos que han estado en esta situación y no tienen preservado ni catalogado su material. Algunos me dicen “lo tengo tirado en una caja, tendría que buscar entre los rollos de fotos”. Digo hasta para las épocas de crisis, cuando un fotógrafo recurre a su archivo y lo sabe administrar, nos coloca en otro lugar, como autores con los pantalones largos, con la decisión de “autorizo que se use acá, y acá, etc.”. Eso tiene que ver con la primera parte de Autorizaciones de Uso. Yo autorizo el uso en tiempo y en espacio. El espacio puede ser cantidad de publicaciones, básicamente hablamos de soportes. Los soportes son diarios, revistas, páginas webs, TV, etc. Cantidad de ediciones impresas: si una editorial comercial quiere hacer un libro con fotografías mías y va a tirar 3 mil ejemplares, no es lo mismo si tira 50 mil. Y si ese libro se va a distribuir en Argentina, no es lo mismo si se distribuye por todo el mundo. Esas son variables que se pueden tener en cuenta. Hablando de tiempo, que es el punto dos, lo comenté en el primer presupuesto: Tienen seis meses para usarlo, por lo que tienen derecho a una publicación en un plazo de seis meses. ¿Por qué? Porque durante seis meses no voy a poder entregar los derechos a otra persona. Pasados esos seis meses, y si no lo usaron, repactamos. Pero no es que yo devuelvo el importe, habrá seguramente un repacto de algún porcentaje. Quiero que vean todas las variantes que se usan, y realmente están especificadas.

Muchos colegas me han llamado en varias oportunidades para decirme “¿sabés que tengo un problema? Mirá yo soy amigo de tal persona que es un cantante, y le regalé una foto porque le quería hacer una nota, y resulta que ahora me cuentan que editó un CD en España y usaron la foto mía”. Yo lo primero que pregunto es si le aclaró que era un objeto de obsequio, que es para uso privado. Por ejemplo en un casamiento. Yo lo que estoy entregando son fotos para uso privado, lo que quiere decir que se puede exhibir, pero esa persona no puede ir a entregarla a una editorial para que la publique sin mi autorización, yo soy el autor. Eso se llama uso privado. Cuando leen “Gentileza Colección Familia X”, es un autor al que no le están pidiendo autorización.

Siempre hablando de los puntos que hay que tener en cuenta. Si es un uso editorial, con fines comerciales, etc. En cualquier lista de precios de un banco de imagen esas cosas son las que hacen variar los precios. Más económico les sale a las revistas poner las autorizaciones de uso en una foto que una compañía publicitaria. Hay una leyenda por ejemplo para la gentileza: “Uso editorial, no comercial, prohibida su venta”. Espacio, ¿Qué quiero decir con espacio? es básicamente dónde va a ser publicada la foto, en qué idiomas, en qué soporte. Todo eso varía por los bancos de imágenes, por las empresas que están comercializando el material. Por ejemplo si yo transmito una foto por internet, y otra persona le da un mal uso y no sabía. En realidad el responsable es el autor porque no lo puso en un soporte como un CD, porque no aclaró en una leyenda donde se alerte la restricción de uso. Hay que alertar para que el otro no pise el palito. Ojalá no hubiera demandas y pagaran por los usos.

Pregunta: ¿Esto quiere decir que para salvaguardar el Derecho de Autoría basta solamente con poner esas leyendas? Volviendo al caso del casamiento, ¿se les debería hacer firmar a los novios algo que diga que el material es para uso privado, etc.?

RC: No, no es necesario hacer un contrato. La factura es el contrato. Se puede hacer una factura a una entidad donde vos ponés “Autorizo el uso de la fotografía del General Menéndez en la salida del Canal 13 etc., para ser exhibida en la muestra itinerante que recorrerá el país durante los años 2010, 2011 y 2012. Valor $0, o un centavo, o lo que sea”. Y ahí está, vos como autor estás autorizando eso. El ejemplo de la boda, los que hacen casamientos son los que más clara la tienen porque siempre recurren al archivo, y nunca entregan los negativos. Vos podés poner autorización “para usos particulares”.

ET: Eso te da la cobertura a vos. Vos seguís entregando las imágenes, es la posibilidad que te da de accionar si no las utilizan como convinieron en un principio.

Pregunta: ¿Hay alguna forma particular de nomenclar una foto en la factura?

RC: Es una breve descripción, porque se supone que cuando una entrega una imagen no es para tener conflictos. Pero en el caso de que se pusiera en duda esa foto, hay una breve descripción. “Es una foto de tal en tal evento”, por ejemplo. Una breve descripción que ancla la foto. Sugiero también que pongan fecha y lugar de toma.

Pregunta: ¿y en los casos en que las facturas son mensuales, de distintas notas, con un promedio de cinco fotos por nota?

RC: Es que no hay que complicarse mucho con la factura, simplemente hay que tener en cuenta los puntos que se ponen. Vos podés poner “por cinco coberturas”, o lo mejor es discriminar una por una “Por autorización de uso de 5 fotografías de la cobertura A, en tal lugar; por 5 fotografías de la cobertura B, en tal lugar.

ET: Y la cuestión esencial es tener las herramientas, hay que pensar cuando uno establece este tipo de vínculos contractuales. Hablamos de criterios a tomar en cuenta.

RC: Hay una Ley, y hay usos y costumbres. Estamos en tierra arrasada, no quiere decir que mañana salimos y no nos contratan porque se creen que nos volvimos locos. El primer punto es tener conocimiento de cuáles son nuestros derechos, y después cada uno los podrá empezar a usar en la medida que uno se sienta seguro de poder usarlos y en la medida de que sea más popular el uso de los derechos. Hoy estuve editando en una agencia que estamos tomando fotografías de 60 free lance de toda América Latina. Y cuando llamo a Haití, contrato a un fotógrafo de Estados Unidos que me dice “Mirá Ricardo, en realidad no voy a poder trabajar porque tengo la asignación con Reuters”. Pero después de los seis días, ya me vuelven las fotos a mí. O sea que la agencia Reuters no está comprando la foto y después la revende, sino que le toma la foto y se la preserva en una exclusividad de seis días. A los seis días, se la está devolviendo al fotógrafo norteamericano en Haití. Quiere decir que pactó una cosa distinta. Hay que conocer las posibilidades, y habrá algún momento donde uno empieza a pactar parcializadamente porque somos dueños de los derechos patrimoniales, y de acuerdo a cómo convengamos con la otra persona, es el contrato que vamos a construir.

Yo no hablo en general, sino que hablo sobre los casos que me ha tocado vivir a mí como fotógrafo. “Tantos dólares, tomá los rollos”, y yo los rollos no los vi más porque se los llevó, no construí mi archivo. Eso era lo que pasaba en Rosario en 1980. En esa situación la leyenda sería “Autorizo el uso de las fotografías de manera exclusiva para todos los usos editoriales y comerciales que considerasen necesarios”. Y ahí fuiste, entregaste todo. O sea, cómo ir construyendo, en tiempo y en espacio, delimitaciones .

ET: Va atado del concepto de autoría y derecho de autor al archivo. Hay muy poca conciencia sobre la cuestión de archivar, tener un criterio de guarda, de ser concientes de lo que hicimos.

RC: Hay una frase que la llevo como leyenda que dice “El autor se reserva el derecho de…”. Es como una máxima. Sintetiza que te querés quedar con algo, porque si vos te quedaste con algo, lo podés volver a usar. Si vos entregaste todo, no podés reutilizar nada”.

Lo que dice la Ley es que si estás en relación de dependencia, la empresa te contrata para que vos produzcas para ellos, y ellos hacen publicaciones a discreción y quedan en su archivo. Eso es al día de hoy sobre la relación de dependencia. El tema es que un fotógrafo no sólo es fotógrafo cuando está en un medio, sino que a veces ya el diario no está y a uno no le queda otra que vincularse como free lance, o como independiente. O fuera del ámbito laboral del diario te llaman de una editorial y te dicen “mirá, quiero que produzcas fotografías para este libro de paisajes”. Yo no estoy de acuerdo con la idea de que todo el mundo entrega y se olvida. Yo impongo delimitaciones, y son lógicas. No impongo delimitaciones irracionales.

Pregunta: En el caso de la relación de dependencia: ¿pierdo la autoría y pasa a ser material exclusivamente del diario?

ET: Tenemos una Ley que nos protege, hay una diferencia clara entre un free lance o alguien que no tiene un contrato estable o no es parte de un staff de algún medio. Pero como decía el Flaco, la Ley que nos protege tiene tres grandes áreas de protección. Esta parte, sensible, porque todos vivimos de ser fotógrafos, o la mayoría de los que estamos acá, tiene que ver con los derechos patrimoniales que es lo que cobramos por lo que hacemos, y de qué manera podemos cubrirnos mejor, tener más derechos a la hora de reclamar, o establecer un contrato de trabajo más justo, desde una factura como muestra el Flaco. Los fotógrafos que estamos en relación de dependencia perdemos al estar en esa situación. Pero hay otras dos áreas que cubre la Ley, y que el Flaco puede explicar mejor que yo.

RC: La Ley de Derecho de Autor, que no es sólo para fotógrafos… a veces he escuchado decir que la fotografía necesitaría una ley, y la ley está. Tiene tres patas, y una es el derecho a la autoría. Ese derecho, los abogados dicen, es personalísimo. “Yo soy autor de esta novela”, pero vos no podés decir que lo sos porque es muy personal. ¿Y por cuánto tiempo? Siempre, vos la encontrás después de mil quinientos años y el autor sigue siendo el mismo. Por su parte, el Derecho Patrimonial es un derecho que cuyo origen nace en el autor y él tiene la potestad de pactar con otra persona de una manera libre. Después claro, las editoriales dicen “bueno macanudo, voy a tomar las fotos de fulano de tal que es colaborador y me las quedo”. Pactaste mal. El autor pactó mal el Derecho patrimonial.

En relación de dependencia la Ley es específica. Si vos estás en esa situación, lo que tu empleador toma de tu creación le pertenece al empleador. Los patrimoniales, no los autorales. De ahí la importancia que cualquier imagen que uno toma tiene que estar claramente identificado quién es el autor, cuál es el lugar y la fecha de toma, y de todas las imágenes, no de algunas sí y de otras no. Por eso la gente de los archivos hoy puede decir que están encontrando archivos que no saben a quién pertenecen.

Pregunta: ¿Investigaron qué pasa con la redistribución de imágenes cuando vos trabajás para un medio, sea un periódico o una agencia, y ese medio vende a otro medio tu fotografía, y ese medio a otra agencia?“.

RC: Con los pies sobre la tierra te puede decir que es ilegal, pero vos también no querés perder el trabajo. Por eso mismo en un momento en el Gran Diario Argentino te hacían firmar un contrato que decía que vos como autor los autorizabas a que ellos revendieran tu material. Es ilegal. O sea, la Ley dice que si a vos te contrata el diario La Voz de Chapadmalal, no es para que aparezcan tus fotos en Clarín. Ahora, vos no querés perder tu trabajo, pero sabé que es ilegal.

ET: Cuando yo empecé a trabajar en NA cobrábamos ventas. Entraría en el criterio que vos mencionás. O sea, lo que hacíamos para los clientes habituales de la agencia entraba en nuestro honorario habitual, lo que se vendía a clientes no tan habituales de la agencia, nos pagaba la agencia un porcentaje. Era lo que dice la Ley, un uso y costumbre.

Pregunta: La instancia que digo yo es aún peor. Una agencia le vende a otra agencia… también existen las agencias Partners de unas y otras que publican casi las mismas fotos en distintos países y regiones y utilizan el mismo bloque de fotos.

RC: Voy a ser bien claro. Yo trabajé en relación de dependencia, trabajé y trabajo como free lance, y hoy estoy en una agencia de noticias que compra por única vez. La agencia donde yo trabajo tiene su banco de imágenes, pero a su vez ha comenzado a hacer contactos con Corvis, entonces las fotos empiezan a aparecer ahí. El primer llamado fue de Brasil y me dicen “Mirá, yo la primera foto que les entregue fue de Lula cuando era joven y estaba en el PT, y ustedes pagaron x pesos, y ahora la están revendiendo, así que quiero que la saquen”. Okey, carta porque el autor pide que la saquen, y lo lógico es que la saquen. Valoren la pulseada ahí, pero no es lógico que los tipos paguen por única vez y después se quedan vendiendo una foto de Lula cuando estaba en el PT, que no es lo mismo que una foto de una margarita de acá a la vuelta. Segundo llamado, similar de Cuba. Tercer llamado, igual. Estoy empezando a recibir llamados y se los traslado a la Dirección Administrativa de la empresa porque la empresa dijo “vamos a tomar las fotos por única vez”. Presión por un lado y presión por el otro, es posible que algo se obtenga. El que llamó por teléfono tiene claro que esa foto él le quiere reautorizar su uso, no que otro lucre por una única vez con la foto esa.

Me parece que estas cosas pasan por el desconocimiento que nosotros tenemos. Me parece que cuando uno sabe de esto… ponele sabés que te están perjudicando… acá estamos un poco para comentarlo. Yo no soy abogado, pero sí hace bastante tiempo que estoy en mediciones.

Pregunta del auditorio: Esto quiere decir que si uno trabaja en relación de dependencia en un diario, el diario que con tu fotografía hace su uso en su ámbito, pero decide al otro día venderla a X empresa o cederla por gentileza, el diario está dentro de la Ley haciendo uso patrimonial de tu foto. ¿Puede venderla sin reconocerte a vos nada?”.

RC: Depende del contrato que vos tengas con ese diario, en qué condiciones estés trabajando con ese diario. La patrimonial es el convenio de dos personas. En realidad la Ley de Derecho de Autor te autoriza a que preserves, pero no a que entregues.

Pregunta: “Por ejemplo si le sacás una foto a Macri, el diario la publica, a Macri le gustó y decide comprarla para hacer una gigantografía. En ese caso, ¿uno puede exigir que la gigantografía esté a nombre de uno mismo, existe ese derecho?”.

RC: Hablamos del estar mencionado ¿no? Yo recuerdo que en 1982 empecé en el Diario Rosario, y al año siguiente hice un Congreso de periodismo en Santa Fe. Y yo iba diciendo que teníamos que tener una ley para ser mencionados. Era la típica discusión de los 80 si teníamos créditos o no en las fotos. Era obligación poner el crédito. Si yo me voy además le hago un juicio por no ponerme los nombres acá. Y las agencias de publicidad también tienen en usos y costumbres, por un lado está permitido y por otro hasta donde hemos dejado que avancen, en las agencias de publicidad va a haber fotos donde ninguna está mencionada. Solamente fíjense que hay una sola autora que es la mencionada en las campañas de Buenos Aires, es Sara Facio. A mí, siendo editor de Noticias, me llegó una carta documento de ella por haber publicado una foto y no le habían pedido ni permiso, ni se la habían pagado, pero lo que sí le habían puesto es su nombre. Recientemente cuando hicieron una campaña donde había fotos de María Elena Walsh, la agencia de publicidad puso “Fotos: Sara Facio”. Tienen la obligación, después está en uno hacérselos saber.

Y después, las restricciones. Te tiro una: “Solamente para uso editorial. Prohibida su venta”. Resulta que después vos la ves y le decís “mirá, se lo escribí en el CD, se lo puse adentro de la METADATA, se lo mande por mail”. Ahí vos lo aclaraste, no le hiciste pisar el palito.

Pregunta: “Decías que la Ley tiene tres patas fundamentales, y falta la tercera”.

RC: En este folleto que ustedes tienen están explicadas. La primera es que yo como autor tengo derecho personalísimo a ser mencionado como el autor siempre, es indelegable. Marcas y Patentes es una ley, Derecho de Autor otra. Marcas y Patentes dice que yo hago un jarabe que se va a llamar Coca-Cola, y es una empresa y puede comercializar ese jarabe. Es cierto, lo produjeron personas, pero ellas no tienen la autoría sobre el producto, sino que se creó una fórmula. El Derecho de Autor te protege siempre como autor, lo patrimonial que es un contrato de ida y vuelta, y el derecho al que vos fotografiaste, el Derecho a la Imagen. Y ahí es la división, ustedes vieron esos contratos de modelos. Yo voy caminando por la calle en el barrio de San Telmo, hago una foto de una pareja bailando tango. Entonces, dos usos hipotéticos: el primero es “Hoy se bailó Tango en San Telmo”, lo que es un uso periodístico; otro uso posible es una tapa de CD, “Los mejores temas del Tango”. Ese tipo que está bailando con la señorita, va a un abogado y me inicia una demanda. Es el Derecho a la Imagen, porque ellos tienen derecho a que su imagen sea exhibida en el lugar donde quieran. Si se trata de un acontecimiento periodístico ese señor no puede reclamar nada porque está el Derecho a la Información que tiene la ciudadanía a saber de los acontecimientos periodísticos. Ahora, si yo tomé una imagen de un bar y hago un libro o un CD, algo comercial o editorial, y voy a lucrar con ello y en la tapa está este fotógrafo y el producto tiene precio de venta, el tanguero me puede decir “usted está lucrando con mi imagen y yo tengo derecho a: a) decir si quiero o no quiero, b) a recibir un importe proporcional al que usted está lucrando”.

Por ejemplo en Brasil, las asociaciones de reporteros gráficos de San Pablo y Río de Janeiro tienen tarifas que están en internet, y más allá de lo que cobran, es muy interesante ver como haciendo uso del Derecho de Autor. Ellos tienen precios establecidos mínimos sugeridos, no les dicen a los socios “cobren esto”. En base a lo que estuvimos charlando tienen: pedido fotográfico de 3 horas de trabajo, otro de 5 horas, y otro de una jornada de trabajo, que son 7 horas. Días de viaje, hora adicional, viáticos, retoque digital… ustedes saben que para una editorial es carísimo contratar un retocador por hora. Por ejemplo, como reportero gráfico te piden una nota en un pedido de 5 horas de trabajo. Vos entregás el material por esa cantidad de tiempo. Si hay una foto que sale en portada de diario tiene un plus, y si sale en tapa de revista tiene otro plus.

ET: Todos saben que la Asociación impulsa una modificación al plazo de protección de la ley argentina, y que dentro también de nuestras posibilidades físicas, hacemos todo lo imposible para generar ese cambio. Le pedio ayuda a Raúl Ferrari para que nos explique mejor el proyecto.

Raúl Ferrari: Tenemos preparado un proyecto de ley. Es básicamente por la extensión del plazo del Derecho de Autor en la fotografía que es la única que tiene protección de 20 años. Nuestro objetivo es que se extienda a 70 años y post mortem, como el resto de las artes. Estuvimos viendo con abogados como se podía tratar cuando uno trabaja en relación de dependencia, pero eso no se puede poner en una ley, se puede tratar en una paritaria gremial o en otras situaciones que requieren un grado de organización mayor, o como trabajadores. Estábamos hablando que la propiedad moral intelectual es algo personalísimo, y en los años 80 se luchó bastante. Ya en los diarios nacionales empezaron a poner créditos, pero todavía seguimos viendo que muchos otros no respetan los créditos, no los ponen, y para que cambie eso vamos a tener que tener un mayor criterio de unidad, ver cómo hacer para que se respete eso. Con ARGRA tenemos un plan de una campaña que serían cartas a todos los asociados, otras a los jefes de fotografía, que también son asociados pero muchas veces tienen un grado mayor de responsabilidad y no lo cumplen. Vamos a hacer esas dos cosas, a presentar el proyecto de ley para la modificación de extensión del plazo, pero sí tenemos que empezar a comprometernos todos en ver cómo se respeta la ley actual, que no se respeta tanto y dice que las fotos deben ir con créditos, ya sean de archivo, de agencias. Tenemos que levantar nuestra voz como colectivo, como trabajadores dentro de nuestros medios, para que por lo menos antes de se apruebe un proyecto de extensión, sí se respete el hecho de los créditos. Ese es el plan a seguir y tenemos que llevarlo todos adelante.

RC: “Yo quería hacer una ampliación porque no sé si sabían esto de los 70 años de extensión. Cuando se produce una obra artística de literatura, fotografía, pintura, etc., hay un plazo de protección patrimonial. Esto es simple; dominio público y dominio privado. Mientras ustedes son los autores de una imagen, está dentro del dominio privado, le pertenece patrimonial y autoralmente al autor. ¿Cuánto tiempo? La Ley dice 20 años después de la primera publicación. A los 20 años de la primera publicación, pasa al dominio público. Argentina tuvo reuniones con el OMPI , firmó tratados, y todos se pusieron de acuerdo en que tiene que rondar entre 50 o 70 años, de acuerdo a las otras obras. La mayoría de las obras en Argentina tienen 70 años post mortem, lo que quiere decir una obra de Borges o Bioy Casares, tiene 70 años de protección post mortem. Porque sus sucesores, mientras hagan la sucesión, pueden seguir autorizando, no autorizando y percibiendo dinero por los derechos. En cambio, la fotografía no porque son 20 años después de la primera publicación, y de ahí ya pasa al dominio público. Lo que se está produciendo es único. Setenta años post mortem hablamos de hijos y nietos. El archivo de Anne Marie Heinrich lo maneja su hijo, hay una aclaración, al haber firmado Argentina, ya queda automático que serían 70 años, pero nunca el Congreso argentino convalidó esa firma. Internacionalmente dijo “estamos de acuerdo” pero nunca se juntaron senadores y diputados para decir “damos lugar a ese acuerdo que se hizo internacionalmente”. Nosotros estamos en desventaja con el resto de las obras.

* La mesa se realizó el viernes 8 de abril de 2011 en el marco del 1er Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapadmalal

DESGRABADO DE LA MESA DE DEBATE “Experiencias Alternativas de trabajo”

Experiencias alternativas de trabajo*

Sergio Goya: Esta mesa va a estar compuesta por Sandro Pereyra de “La Diaria” de Uruguay; los chicos de “SubCoop”, una cooperativa de fotógrafos; contamos también con Marcos Adandia y su experiencia en “Dulce Equis Negra”; además, Gonzalo Martínez y Pablo Piovano, que coordinaron un taller en la isla Maciel y generaron un proyecto - libro, que es “Ojos y voces de la isla”

Sandro Pereyra: Primero que nada, una felicidad enorme de compartir esta experiencia. Agradecer y ojala nosotros podamos invitarlos a ustedes en alguna propuesta como esta. Felicitarlos, realmente, por lo que han logrado.

(video panorama de “La Diaria”)

En La Diaria, los fotoperiodistas somos… bastante privilegiados. Fuimos seis o siete los que empezamos a pensar, por fines del 2003 principios del 2004, en un diario. Cuando quisieron pensar en la redacción, ya estaba el equipo de fotografía armado, entonces, corrimos con ventaja en la concepción de ese medio. Otra cosa importante es que La Diaria es el medio de sus trabajadores, somos un proyecto de propiedad colectiva. Es una sociedad anónima, creada por nosotros, la que lo edita, pero el paquete accionario principal, que maneja la empresa, pertenece a la cooperativa La Diaria, que es de sus trabajadores.

Nosotros iniciamos en 2004 y salimos en marzo de 2006. Acabamos de cumplir 5 años. Tuvimos ese tiempo para pensar, y tuvimos la libertad hacer el diario que queríamos hacer como fotoperiodistas. Hay algo que esta muy bueno, y es todo una responsabilidad, es el hecho de que la tapa del diario se construye en base a la foto; primero está la foto y después viene el titulo.

Les voy a leer algunos puntos principales, que nosotros discutimos, definimos…Uno de los puntos principales que definimos es el siguiente:

1) El fotógrafo de prensa, es un periodista. Entonces, tenemos que asumirnos como tales y a partir de ahí relacionarnos con la redacción.

2) No todas las noticias son traducibles en imágenes, lo sabemos todos. En un solo día no se puede ir a cubrir 8 conferencias de prensa, porque a nivel imagen es un embole

3) Menos es más. Somos un diario de 16 páginas. Esa máxima que se aplica en la fotografía “menos es más” tratamos de aplicarla. Mejor poco y bueno, en lo posible, que mucho y nada.

Otro detalle importante es que nosotros publicamos una foto por página y tenemos estipulada cual es el tamaño mínimo de esa foto. En la diaria no puede salir una foto a menos de tres columnas, de base. Otra cosa que hemos podido desarrollar es trabajar a dos velocidades: uno de nuestro compañeros no trabaja en la agenda diaria, sino que produce un foto reportaje por semana y coordina con la edición y sale publicado. Esto era también una negociación, en la parte interna de la diaria. En un diario de 16 paginas, los fotógrafos tienen todo esto, y aparte, una página entera por semana. Estuvo bien, pero por cuestiones económicas no lo pudimos sostener, por lo menos hasta hoy.

Otra cosa que incorporamos, que define y que está bueno como fotoperiodistas es que el pie de foto lo escribe el fotógrafo, lo escribe el editor de fotografía; no lo escribe un redactor. Me acuerdo que cuando estábamos discutiendo estas cosas, empezamos a ver los diarios nacionales y encontramos una nota sobre la partida del buque-escuela de la armada uruguaya y en la que había una niña mirando. El pie decía “recién te fuiste y ya te estoy extrañando”; nos pareció patético este y otros que se aplican muchas veces. Por ejemplo, si la foto de archivo dice “es de archivo”; así sea el peor enemigo dice “José Maria Sanguinetti, en la cámara de senadores. Foto Fulano de tal. Archivo y la fecha en que fue tomada la foto”.

Un detalle importante. En Uruguay existe una ley de derecho e autor que es bastante buena, pero pocos medios la respetan. Por ejemplo, en un diario hay un fotógrafo que se llama “Archivo El País”; o publican una foto de agencia, y como tienen por contrato a lo sumo le ponen bien chiquito “AP”, “AFP”. En La Diaria, siempre, toda fotografía va con el nombre del autor. Cuando son fotos que llegan de afuera y no nos proporciona el nombre (como sucede por ejemplo con presidencia Argentina o presidencia Uruguaya), nosotros ponemos “Presidencia Argentina, sin datos de autor”. Es como un pequeño acto militante para defender que exista el crédito.

Otra de las cosas que trabajamos es la cuestión del archivo. Desde el principio empezamos a trabajar con un archivero, como un parte mas del grupo y definimos toda forma de archivar que a la larga nos ha dado buenos resultados.

Definimos también cual era el rol del editor grafico. Participa de la reunión de editores. Nosotros tenemos una reunión de editores en la diaria, donde se definen los contenidos del día. Esto no sucedía mucho, salvo en “El Observador”, hablando de Uruguay, que tuvieran en la mesa de redacción al editor de fotografía. Eso no existía. Nosotros lo implementamos y no se cubre nada que no haya pasado por la decisión del editor gráfico. También, el editor grafico es el responsable de dejar las fotos prontas para publicar; o sea, en la mayoría de los diarios de allá, la foto iba a lo que antes era el scanner y alguien le hacia el retoque de fondos, alguien que manejaba el photoshop pero que no tenia ojo de fotógrafo. En La Diaria, la puesta en página de la foto, la hace el editor de fotografía

Creo que logramos todo esto, porque como decía antes, fuimos los primeros en empezar a pensar como iba a ser el diario, pero también lo logramos por el contenido político del proyecto. Es un diario de sus trabajadores, tanto de los que fotografiamos como de los que escriben. Todos tienen la libertad de trabajar los temas que quieran y como quieran. Hemos ido aprendiendo, a partir del trabajo cotidiano, el tema de la auto-gestión. Es muy lindo, pero después hay que hacerse cargo, hay que aprender a lidiar con las ventas, con la distribución, para ver de donde sale la guita para pagar los sueldos. Si bien nosotros somos cooperativa, no todos los trabajadores de La Diaria forman parte de esa cooperativa, entonces somos un colectivo de trabajadores y a la vez somos patrones de nuestros compañeros. Y hemos tenido que ir lidiando con eso y…esta buenísimo.

Aparte, junto a La Diaria existe el café La Diaria, un Centro cultural. No es propiedad nuestra, de los asociados, pero nosotros pusimos la marca. En ese café funciona una biblioteca, una mediática que se esta construyendo, y todo esto pensando en generar un comunidad La Diaria.

Otra cosa que me olvidaba de comentar es que la Diaria no se vende en kioscos del área metropolitana, es un diario por suscripción. Entonces los suscriptores pueden elegir si el diario les llega a las 7:30, a las 9. Esta idea va dirigida a seguir generando esta idea de comunidad, para que no se nos vayan los suscriptores y a la vez vengan más. En marzo del 2006, La Diaria tenía 1200 suscripciones. Al día de hoy, en una encuesta hecha por gente de acá, La Diaria es el segundo diario del Uruguay y estamos llegando a los 7700 lectores. A si que imagínense lo que vende el primero; debe estar llegando a 14 mil de lunes a viernes. En todo caso después me hacen preguntas. Gracias

Sergio Goya: Bueno, siguiendo con la línea de cooperativa, los chicos de “SubCoop”, Gisela Volá y Gerónimo Molina

(video panorama de “SubCoop”)

Gerónimo Molina: Queríamos agradecer la posibilidad de venir acá, para conocernos y encontrarnos con muchos colegas. Nos han movilizado mucho los talleres y nos parece súper groso el laburo que hicieron.

Voy a hablar sobre todo apoyándome en el video que muestra los inicios del grupo, mas o menos por el 2001, 2002, me imagino que todos saben como fueron esos momentos. Sub (SubCoop) surge de alguna manera con gente que venia de la Indymedia y se conforma como cooperativa legalmente en el 2004.

La idea es buscar alternativas, construir una plataforma, un territorio donde se pueda decir lo que uno piensa, trabajar del modo al que uno le gustaría trabajar, cuestionar de alguna manera los modos de producción y las relaciones laborales. Básicamente, esa es la idea por la que arranca Sub, construir esa alternativa. A partir de eso se va armando un universo, o un punto de vista colectivo de sub, que esta apoyado en los movimientos sociales de los que muchos hemos participado, en la luchas que han llevado adelante nuestros pueblos, los movimientos de desocupados, bueno… lo que genera reportaje.

Entendemos Sub como un proyecto de vida a largo plazo, y por ende se esta en permanente movimiento y contradicción; se lucha día a día para hacerlo sustentable.

Actualmente somos siete, seis fotógrafos y tenemos a Gabi que se encarga de la distribución y de las ventas, contacta con lo editores y nos ordena y reparte el laburo; también, muchas veces, nos da un viso de realidad cuando lo necesitamos. Tenemos un compañero que esta en Madrid y otro en Francia, pronto para venirse a la Argentina.

Tenemos una dinámica de buscar laburos colectivos, que de alguna manera esto nos fija, nos compromete y nos tira. Tratamos de hacerlo dos o tres laburos de largo aliento por año. Para esto podemos llamar a los compañeros que están afuera, si es que se junta el dinero necesario.

También cada uno tiene su desarrollo y sus laburos personales, que a veces implica viajar, o a veces implica no estar en el día a día del laburo que genera el mango. Entonces, el resto se hace cargo un poco de sostener la olla. El dinero que entra mensualmente se reparte de la misma forma entre todos, independientemente de lo que se haya trabajado. Eso genera un compromiso grande para con el colectivo; un compromiso fotográfico y un compromiso laboral. Un poco en esa dinámica es que surge, después de bastantes discusiones y de algún modo como conclusión, el hecho de que firmemos los trabajos colectivamente. Quizá haya trabajos que lo hizo una sola persona y lo firma el colectivo. Entendemos que es como consecuencia del modo de trabajar. Puede que uno este desarrollando muchos días un laburo y el resto se este ocupando de sostener la estructura de Sub, colaborando en la producción o de múltiples formas. Por eso creemos que hay un correlato en la manera de firmar. Y bueno, va limando los egos; impide que eso interfiera en el proyecto y esto va generando un sentido de unidad, le va dando fuerza al proyecto

Gisela Volá: Gracias otra vez, estamos re contentos de estar acá. Siempre nos cuesta reducir tanto que contar, tanto tiempo de gestación y experiencias, que bueno…. Esto es un colectivo y todos los colectivos son diferentes de acuerdo al país, de acuerdo a las necesidades. Nosotros tenemos en cuenta que nuestro colectivo nació, se gestó en una época donde a nosotros nos agarró un escenario atractivo de fotografiar. Entonces no fue una decisión muy difícil de tomar que era lo que había que fotografiar; estaba pasando delante de nuestra cara y era hacerse cargo un poco de eso. Después las inquietudes empezaron a ser un poco más grandes y hoy somos 7 y tratamos de coincidir en lo que pensamos para hacer cosas juntos.

Si bien nosotros nos sentíamos un poco solos en esta historia, por que éramos un colectivo, porque estábamos muy hacia dentro de nuestro grupo solucionando como sustentarnos, como vivir de esto y llevarlo adelante. Nos empezamos a relacionar primero con colegas de colectivos de otros países. En el 2005 se abrió la posibilidad de ir a Francia a un espacio de colectivos específicamente, donde nos invita un colectivo local y ahí conocemos a montón de gente. Empezamos a pensar que no estábamos tan solos, que colectivos existen y muchos son muy fuertes, con muchos años y sostienen su proyecto. Ahí se empezaron a compartir colaboraciones, intercambios, exposiciones, experiencia de trabajo y aprender como cada uno puede adaptar la estructura de colectivo en el país que le toca vivir. Por eso digo que somos todos diferentes, pero estamos hermanados por el hecho de trabajar de esta forma, generando nuestro propios medios.

En esta historia, bueno… nos permite viajar. Los colectivos mas fuertes en Latinoamérica que están conectados con esta red son de Brasil, de Perú, Costa Rica y Ecuador. Colectivos hay siempre y surgen a cada rato, pero estoy hablando de los que están establecidos mas seriamente, con mas tiempo y mas estabilidad. Hay muchos colectivos que empiezan y que caen rápidamente, porque hay una realidad nosotros una vez escuchamos a un escritor de los nuestro que es Washington Cucurto, que dijo “esto de ser cooperativa no es para todos, es muy difícil y se gana muy poco y hay que poner mucho” y realmente es así: a nosotros nos costo mucho conseguir 5-6 sueldos mensuales. Hoy lo logramos y estamos muy felices por eso. Mucho le debemos a otros colectivos del exterior que nos han presentado afuera, porque hoy nuestro mayor ingreso son de las publicaciones de afuera, es así.

Les cuento esto de los colectivos porque es un poco la dinámica y nosotros lo vivimos muy desde adentro. El año pasado nos juntamos en Madrid 20 colectivos de todo el mundo, donde quedaron afuera más del doble. Participamos durante 10 días, donde pudimos conocernos un poco más, con presentación y ponencias. Luego nos fuimos todos a fotografiar una ciudad cerca de Madrid, y terminamos con una galería llena de fotos contando la historia de esa ciudad. Experiencias así hemos tenido varias, porque nos enriquecen absolutamente. Además, entre los colectivos nos volvemos referentes, nos dan ideas, nos dan potencia, nos hacen creer en nuestro proyecto y nos hacen ver que no hay que bajar los brazos y que no tenemos que salir a buscar un trabajo fijo al primer mes que se bajan las ganancias.

Básicamente el ingreso es la prensa, pero también muchas veces nos ocurre que no sabemos cual es el destino del trabajo que hacemos; hay trabajos que no terminaron publicados, pero que formaron parte de una muestra o de otro proyecto que no fue precisamente la publicación.

Además, para contar otra pata de SUB, nosotros hace tres años empezamos a realizar proyecciones al aire libre, cada vez con una convocatoria mas grande, donde nos interesaba mostrar trabajos de otras personas, que normalmente eran colectivos o algún fotógrafo de otro colectivo que estaba viajando y que pasaba por Argentina y decíamos “veni, trae tu material y contanos como lo hiciste, para poder mostrar tu trabajo acá”. Recibimos mucha gente y a su vez ellos nos reciben en otras partes.

Sergio Goya: “Ojos y voces de la isla”. Gonzalo Martínez y Pablo Piovano

Pablo Piovano: Buen día. Nosotros estuvimos trabajando en un proyecto en la isla Maciel, con adolescentes y niños. Ellos son quienes hicieron las fotos ahí, nosotros de alguna manera fuimos facilitadores, capacitadores. La experiencia consistió básicamente en entregarles cámaras y que ellos puedan tener un espacio de expresión y de documento.

El proyecto nace de una necesidad real. Nos convocan ahí, porque estaban fusilando a los pibes; la comisaría 3ra de Dock Sud estaba fusilando pibes. Así fue como Cristian Alarcón empezó a investigar y convoco un grupo de fotógrafos, a través del pedido de las madres de los niños de que se genere un espacio de esparcimiento, de relación, de dialogo; ponernos a pensar que era lo que estaba pasando allí.

Nos tomamos un buen tiempo para realizar este trabajo. Lo llevamos adelante durante dos años, con adolescentes primero y después otros dos años con niños.

Fue una experiencia para mi, muy fuerte. Siento que ha cambiado para mi la relación con ellos y me ha sido de mucho alimento, seguramente mucho mas de lo que nosotros hemos dejado. Y mas allá de toda la fuerza documental que pudieron dejar durante estos cuatro años, todo este registro que la verdad, tiene mucha fuerza, un realismo muy crudo; lo mas importante para mi es la relación, el nexo, el puente entre los chicos y nosotros. Fue difícil también encontrar esa línea, donde la relación podía ser bien encauzada. Fue ponerse a pensar, cuales eran nuestros sueños y que es lo que realmente podías hacer ahí.

La isla Maciel, para el que no la conoce, es un barrio muy castigado por la violencia, queda ahí enfrente de la boca. Hay que cruzar un río negro que es un poco lo que vimos acá (en el video), “El riachuelo”. Un lugar marginado, castigado por la pobreza y la violencia. La mayoría de los chicos con los que hemos trabajado tienen algún familiar muerto por la policía o algún inconveniente con la ley

Cuando lo comenzamos, no sabíamos si iba a durar un mes, dos meses, pero las cosas se dieron como para que podamos ir, y ellos nos abrieron las puertas de una manera muy bella e intima. La foto tiene esa posibilidad, hacernos entrar rápidamente en la intimidad. De alguna manera ellos también entraron en la nuestra, por ejemplo Juancito, uno de los chicos que estaba ahí, estuvo haciendo una pasantía para fotógrafo en Pagina/12, estuvo viviendo un tiempo largo y estaría bueno que estuviera sentado aquí y sea el que esté hablando en realidad. Pero la verdad, lo que a mi me ha demostrado es que es un proyecto difícil de sostener y que lo que si se puede hacer, con lo que yo me quedo es con esas horas en que intercambiamos y que podíamos compartir nuestras experiencias; nosotros posiblemente les podíamos dejar algo y ellos a nosotros también

Un poco esto, de darles las cámaras a ellos, era la posibilidad de romper con la estigmatización que tienen estos espacios, estos lugares; era la posibilidad de poder contarse a si mismos. Hicimos una edición, estuvimos casi un año editándolo y en algún momento estuvo la propuesta de hacer una edición horizontal entre ellos, pero fue una locura. Pero se decidió editarlo para que cada participante del taller tenga una foto en el libro; no quisimos poner las fotos más impactantes, las mejores, sino que estemos todos ¿no?, ya que era un colectivo, una especie de militancia lo que estábamos haciendo ahí.

(video de fotos tomados por los participantes del taller)

Gonzalo Martínez: este proyecto tuvo como eje fundamental tratar de hacer algo, antes que nada. Las dificultades se presentaban desde que lo chicos estaban en una situación completamente angustiantes. Cada sábado que los recibíamos en el club “3 de febrero”, era el milagro de darle las maquinas y que el sábado siguiente llegaran con ellas. Ahí nos empezamos a dar cuenta cuan importante era el trabajo, cuando cada sábado llegaban los chicos con sus camaritas, nos devolvían sus rollos y empezaban a trazar ese documento que duro 4 años y era el registro de la intimidad de ellos mismo.

Hay un eje fundamental que llevamos a cabo en el trabajo y sobre todo en la edición, que era la no estigmatización de estos chicos, y de su vida y de su familia. Para estos chicos era bastante difícil sostenerse en el lugar donde vivían, entonces para que contar lo que todos sabemos (el paco), para que mostrar toda esa violencia, que seguramente con los años podremos revisarla, pero no era muy constructivo en ese momento (cuando editamos el libro) mostrar esa cara de la isla.

Todo ese archivo de cuatro años de trabajo va a pasar a estar en la fototeca de ARGRA donde el día de mañana podremos revisarlo, podremos reabrir esas fotos, que eran tan violentas y que cada día nos impactaban. Preferíamos que en libro (fue una edición de mil ejemplares) quedara mas la historia del sueño de estos chicos, quedara mas la intención, los paisajes, que quedaran las madres adolescentes y solo dejamos esa fotito que vieron de esa especie de instalación de la pistola con las diez balas, de las cuales estábamos repletos todos los sábados.

Yo quiero hacer un homenaje muy grande a Waltercito. Para nosotros es alguien muy importante. Todavía el día de hoy nos hace pensar que tenia sentido el haber ido y habernos bancado lo que ellos se bancan a diario. Nosotros íbamos una vez por semana y nos volvíamos, como ellos decían “ustedes vienen, pero después se van”. Waltercito tenia diez años y era una especie de niño mimado para nosotros. No sabia leer, no sabia escribir, ya fumaba, se drogaba y todas esas cosas que pasan a diario, pero era un fotógrafo de la puta madre. La familia, en su casa, tiene todas sus fotos colgadas. En la isla están los 500 libros que dejamos, de alguna manera me parece que ahí queda el documento. De alguna manera tratamos que estos chicos, en las dos o tres horas que nos tocaba estar con ellos, inventar juegos; no había otra manera que darle un formato lúdico. En los primero 20 minutos les pasábamos audiovisuales de algunos fotógrafos que tuvieran que ver fundamentalmente con la violencia, con la contaminación; se hacia muy difícil mantener la concentración de ellos. Lo importante era que ellos se volvían con una sonrisa, porque aunque sabíamos que no había una expectativa o una salida laboral, era una forma nueva de empezar a mirar su vida, de seguir registrando su entorno.

La idea es volver, la energía se va potenciando con los años, y siento que hay un compromiso que se siga sosteniendo con la escuela pública. Fue muy importante para mi no trabajar con punteros políticos, por una ideología marcada por un interés personal. Muchas veces, con Pablo, rechazamos trabajos de las petroleras que querían lavar su camino al cielo, lo cual nos iba a generar dinero, seguramente, nos iba a generar viajes, pero optamos por seguir en esta especie de militancia

Sergio Goya: bueno, para terminar esta primera etapa, Marcos Adandia y “La Dulce…”

(video panorama de trabajos publicados en la “Dulce Equis Negra”)

Marcos Adandia: La revista la venimos haciendo hace 6 años. Es un espacio que tiene el propósito de compartir desde lo particular a lo general trabajos hechos a lo largo del tiempo, con compromiso y con amor de el que lo hizo. Ahí hay una cantidad de emoción que necesariamente se expresa con la confianza de que va a ser recibido así, de ese manera lo publicamos con el cuidado y el respeto que la fotografía merece.

Otra intención de la revista es el hecho de pensar que cada uno de esos trabajos con su particularidad, con su individualidad, compartiendo el espacio del que estamos hablando recién, se contextualizan y forman una frase, un pensamiento. La idea de la revista es compartir un pensamiento, un sentir, sobre tantas cosas, la memoria, nuestra ideología, nuestro sentimiento. Muchos de los trabajos son de carácter bien intimo y confiar que la dirección que lleva este intento es la de aportar lo poco que pueda, lo que sea, en la tarea de cada uno, en un mundo mejor, en una forma mas sana, en una forma mas sencilla, en una forma mas sincera de vida en este tiempo y para nuestra gente.

Es un proyecto personal, hacemos toda la gestión con mi compañera. La editamos cada seis meses, que es un tiempo que más o menos nos permite madurar lo que vamos a publicar. En un origen estaba la idea de que cada revista tenia que ser como una idea, una reunión a la que se invita un grupo de gente que van a transmitir un pensamiento, que van a transmitir una emoción. Básicamente es la posibilidad de decir algo a través de una emoción; nos alejamos bastante de lo que es el discurso político. Siento en este tiempo que mi necesidad es comunicarme desde la emoción y desde el corazón. Lo que hoy puede modificar, y contribuir a que se modifiquen las cosas a favor de nuestros sueños, de los sueños de nuestros hermanos desaparecidos quienes han dado la vida en esta tierra para hacer algo mejor, es hacer la cosas sinceramente, desde el corazón y si contribuye de alguna manera en algo bienvenido.

En todo caso, también tiene la parte individual que tiene que ver con mi trabajo como reportero grafico. El proyecto nace así del cansancio de escuchar, en las revistas, en los medios en los que iba trabajando, cuando yo proponía mis fotos o me mandaban a hacer algo, las respuestas solían ser “esto no es un libro”, “esto la gente no lo entiende”. “esto no es una galería”, entonces en algún momento, frente a todas esas negativas y con la arrogancia de “esto la gente no lo entiende”, me propuse hacer algo que sea un libro, que sea una galería, confiando en que la gente entiende cuando las cosas están así vistas, con sinceridad.

Pregunta: No se si les corresponde a todos la pregunta, pero quería saber si los proyectos eran sustentables

Sandro Pereyra: Muchas veces tuvimos que resignar salario, pero si vos trabajas en un lugar que te pagan mal, tu trabajo nos se ve y te tenes que pelear todos los días con un armador…bueno. Pero si tu trabajo esta valorado por iguales compensa los sufrimientos. Nosotros desde 2006 hasta 2009 estuvimos arrastrando deuda, solo accedíamos a créditos de usureros, con tasas anuales imposibles. Recién en 2009 se igualaron las ventas y cubrió el presupuesto y ahora tenemos el desafió de mejorar los sueldos y evitar el pluriempleo que es lo que sucede en muchos casos.

Marcos Adandia: Yo bueno… trabajo en otros lados, no es un proyecto del todo sustentable.

Gisela Volá: Esta claro que ninguno de estos proyectos es para ganarse todo el dinero, pero desde el punto de vista del “espacio de libertad” es bien diferente. Al principio nosotros no ganábamos nada y bueno…hacíamos otras cosas. De poco fuimos logrando dejarlo.

Muchas veces tenemos que resignar el trabajo autoral, que es el que más nos gusta, para poder sustentarnos. También pedimos ayuda económica para proyectos en particular, o aplicamos a becas.

Pablo Piovano: lo que pudimos rescatar de lo libros, con el bono contribución, lo fuimos llevando a la escuela de la isla, pero plata, para nosotros, no.

Gonzalo Martínez: Alguno recursos los conseguimos por medio de una fundación, que conseguía becas a través de la secretaria de cultura de la nación. Esto se invertía en las camaritas, en alguna salida para los chicos a ver alguna muestra

* La mesa se desarrolló el domingo 10 de abril de 2011 en el marco del 1 Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapdmalal.

Desgrabación: Miguel Goya

DESGRABACION DE LA MESA GENERAL DE EVALUACION Y CONCLUSIONES

Pascual Belvedere: Es momento de dar cierre a este primer encuentro de reporteros gráficos. Teníamos muchas preguntas, muchas dudas, en el momento de encarar esta tarea titánica. Y hoy, a pocos minutos del cierre, lo único que tenemos es satisfacción. Ese es mi estado de animo. Me lo hicieron saber todos los colegas durante el fin de semana. Creo que es lo mejor que nos pudo haber pasado; estar todos acá reunidos discutiendo una política en común, tratando de sacar conclusiones sobre el rol de los reporteros gráficos. Cuando todos están discutiendo el rol de los medios en la actualidad, cuando escuchamos algunas peleas que son hasta estériles, nosotros decidimos tomar el toro por las astas y empezar a dar la discusión. Este es el papel que nos toca; este es el momento histórico que tenemos.

Foto de José Gomez

Autor: José Gomez

Participantes: Pascual Belvedere, Ezequiel Torres, Sergio Goya, Raúl Ferrari, Ezequiel Pontoriero, Martín Zabala, Daniel García. *

 

Pero esto no empezó con nosotros ni con los que están por llegar, sino que hay una historia, la historia de la Asociación de Reporteros Gráficos que funciona desde 1942. Tenemos antecesores que marcaron u obturaron, como me gusta decir, porque son los que obturaron la historia del fotoperiodismo argentino. Queremos hacerles un homenaje: fueron los precursores, los que tuvieron la idea de organizarnos y hacer una asociación que hoy es ejemplo en todo Latinoamérica; para ellos, sobre todo los que no están, un calido homenaje de nosotros, sus sucesores, que tomamos la bandera (como dijo en una charla Daniel García), así como los que fundaron ARGRA; con nueva generación que en los años 70 produjeron un cambio, un quiebre, en lo que era el fotoperiodismo argentino y este congreso nacional que inaugura una nueva etapa, creo que no son hechos aislados, están todos entrelazados.

Es nuestra historia, es la historia de los reporteros gráficos en el país, es la historia de la imagen, es la historia de informar a través de las imágenes y como foto periodista, creo que todos los que participamos en este congreso primero, fundacional nos merecemos un aplauso, porque damos la discusión de lo que queremos hacer, cómo lo queremos hacer, y de qué manera queremos informar.

Pasamos a leer las conclusiones que tuvimos con los grupos de trabajo que se forman con los distintos temas. En la mayoría de los casos hicimos un punteo. Queremos que esto se traduzca en hechos concretos y por eso se formaron los grupos. Discutieron, propusieron y ahora vamos a leer las síntesis.

El primero grupo, coordinado por Daniel García y Martín Zabala, trataban el Nuevo perfil profesional, transformaciones tecnológicas y las nuevas estructuras mediáticas. Tiene la palabra ellos dos

Martín Zabala: Síntesis no hay. Estuvo muy interesante la discusión. Lo bueno es que logramos que casi todos podamos expresarnos, lo que sentimos, lo que pensamos y una de las cosas que hicimos para tratar de generar algo mas formal o estructural fue trazar un listado de fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas que trae consigo las nuevas tecnologías y todo lo que esta pasando ahora.

En cuanto a las fortalezas, determinamos que estamos organizados, nos estamos organizando, y eso tienen mucha fuerza. En segundo lugar, nosotros, como fotógrafos, tenemos un punto de vista particular sobre la realidad y eso nos permite tomar las riendas de otros instrumentos para poder llevar a cabo nuestro trabajo que es, claramente, ver la realidad; capacidad de contar historias; somos periodistas; tenemos poder de síntesis y un criterio de elección de lenguaje. Esto tiene que ver con saber que lenguaje se adecua a determinada situación

En cuanto a las oportunidades que nosotros vemos con todo esto que esta sucediendo, en primer lugar, es estar en el momento en que esta pasando. Me parece una oportunidad muy buena estar en el nacimiento de este nuevo lenguaje que hay. Nosotros usamos como base de la charla las dos experiencias que tuvimos de las jornadas de la noche (proyecciones), del trabajo de nuestros compañeros. Otra de las oportunidades, es la posibilidad de generar pautas de un nuevo lenguaje; tratar de nosotros empezar a pensar las pautas de cómo seria. Tenemos nuevas oportunidades laborales y mayor espacio de expresión.

En cuanto a las debilidades, vemos la necesidad de capacitación. Eso, bueno…ARGRA también me imagino que vamos a tomar una solución. Charlarlo un poco y ver de que manera se puede adecuar eso para que todos, en todas partes del país podamos tener mayor capacitación en este sentido.

Necesidad de un marco legal, que contenga toda esta maraña de situaciones compleja que se dan a partir de esta intromisión en nuestro trabajo. Nuestra capacidad de negociación; estamos débiles en ese sentido. Creo que gran parte de esa debilidad la podemos solucionar con la fortaleza de estar organizados. En el mismo momento están pasando las dos cosas. El costo de las herramientas, para la gente que es freelance. O la posibilidad de cada uno, en grupo, logre que los medios dispongan las herramientas adecuadas para realizar bien su trabajo. La dificultad de acceso, básicamente, a esa herramientas.

En cuanto a las amenazas que estuvimos viendo: una de ellas es la superposición de tareas, en desmedro de la calidad. La situación concreta de hacer foto y video en una misma situación, en un mismo lugar, simultáneamente. Obviamente no se pude hacer; hemos llegado a la conclusión de que poder se pude, pero no se pude hacer bien ninguna de las dos cosas.

La pérdida de fuentes de trabajo, en cuanto al trabajo audiovisual. Se esta generando movimiento, porque es algo que esta avanzando en todos los medios. Va a generar situaciones laborales complejas y nosotros tenemos que ver como nos paramos con respecto a eso; y, bueno, la falta de remuneración con respecto a tareas diferentes o especificas que tienen que ver con esta actividad

No hemos llegado a conclusiones cerradas con respecto a esto. En la mayoría de los casos hay mucha coincidencia. Sson puntos para abrir el debate que lo podemos seguir dando en la calle, en las reuniones, en próximas reuniones en ARGRA, en encuentros exclusivos para hablar de estos temas. Gracias

PB: Vamos a pasar a un tema candente: la responsabilidad ética en la tarea de comunicar. El grupo estuvo coordinado por Jorge Sáenz que ustedes lo despidieron hace un rato, Marcos Adandia y Sergio Goya, que es quien les va a hablar

Sergio Goya: sobre la responsabilidad ética en la tarea de comunicar y la relación con los medios y nuestros compañeros de trabajo, con nuestros fotografiados. La charla fue buenísima, vino casi todo el mundo; hubo agradecimientos y situaciones de haber encontrado un ámbito, por lo cual uno de los puntos fue rescatar la organización en la que estamos, como dijo Martín. Estamos organizados, y eso nos pone en un buen lugar, un buen punto de comienzo.

Las conclusiones, son puntos a trabajar no son conclusiones. Tienen que ver con algunas formas de organización, como por ejemplo es llevar lo conversado acá, a nuestros ámbitos laborales; generar ese tipo de discusión que se genero acá, con los que no estuvieron acá. Para eso se pidió a la organización que los documentos que se generaron en el encuentro, como el video o las relatarías, sean distribuidas en buena forma.

Uno de los puntos que se toco, es la profundización en los compromisos con nuestro trabajo fotográfico. Creer en la valorización de nuestro trabajo; creer en lo que hacemos y generar un compromiso con la verdad desde ese lugar.

Hay una crítica hacia la forma en que nosotros nos relacionamos con nuestros colegas a la hora del trabajo y también hacia la forma en que avasallamos a nuestros fotografiados. Sobre todo en las situaciones de dolor del prójimo. Se dijo, por ejemplo, que a veces uno hace cosas que ni siquiera los medios piden; que nos ponemos como en una situación por arriba del dolor de los demás y que eso es una cuestión a revisar y que tiene que ver con el respeto hacia el prójimo y hacia nosotros mismo y nuestra tarea.

Uno de los puntos que también se habló y que se quiere agilizar, es el fortalecimiento de las relaciones internacionales. Hay compañeros de Uruguay, de Paraguay, de Brasil que fueron muy activos con nuestro encuentro; participaron realmente como pares, colegas, con otras situaciones que padecían en su propio lugar de trabajo, pero que también son las mismas que acá. Ellos rescatan mucho la organización que nosotros poseemos y la intención es también hacerles llegar nuestro material, nuestras conclusiones y ayudar en la organización. América latina se esta uniendo y este es nuestro aporte a esa unión. Y bueno, creo que nada mas. Gracias

PB: El próximo grupo, que coordinó Carlos Bosch y Ezequiel Torres, trataba el tema de redes de comunicación y trabajo. Escuchamos la síntesis

Ezequiel Pontoriero: No llegamos a ninguna conclusión. Llegamos a una propuesta. Entendemos que la comunicación es la clave del fracaso o del éxito de algo, mas bien del éxito, que es lo que procuramos. Para eso, Carlos proponía que cada uno armara un blog, que eso sirva como forma de comunicación, individualmente y grupalmente, a través de un foro quizás, que puede estar en la pagina de ARGRA. Es una decisión, en principio, individual, de generar un Blog; tomar la decisión de comunicarse; ordenar nuestro trabajo, ideas, intenciones, a través de esta herramienta tecnológica y centralizar por medio de un coordinador, moderador. También se hablo de una publicación en papel, en la Web; no se si el papel es lo mas acertado, es caro, los árboles, el agua, etcétera.

Ezequiel Torres: Reconocimos, tanto como dijo Martín y Sergio, que este es un espacio que se abre y me parece que es para todos trascendente y en ese sentido creemos que hay que tener una actitud militante, hay que asumir una responsabilidad como participantes de este primer encuentro nacional y hacerse un poco mas cargo, y multiplicar.

Me voy a tomar el atrevimiento de leer una frase de uno de los textos que repartimos para que lean, y que, me parece, refiere mucho a esto. Es un texto de John Berger y dice lo siguiente: ” [...] La promesa de un movimiento, es su victoria futura. No todos los deseos, conducen a la libertad. Pero la libertad es la experiencia de un deseo que se reconoce, se asume y se busca. El deseo no implica nunca la mera posesión de algo, sino la transformación de ese algo. El deseo, es una demanda; la exigencia de lo eterno, ahora. La libertad, no constituye el cumplimiento de ese deseo, sino el reconocimiento de su suprema importancia. Hoy, el infinito (y me tomo una licencia) esta del lado de los fotógrafos”

PB: Sigue el grupo que trato el tema derecho de autor y lo coordinó el ex flaco Ceppi junto con Raúl “Darta” Ferrari

Ricardo Ceppi: El objetivo del grupo era percibir el grado donde cada uno estaba situado en relación al conocimiento de las problemáticas y herramientas en el tema; si era correcto, si estaba pasando bien o pasando mal. La primera sensación que tuve, es que hay una clara diferenciación entre la problemática del que está en relación de dependencia y el que trabaja independiente. Con la salvedad que el que está como colaborador no sabe donde situarse.

Los problemas que se suscitaban, tanto para el que esta en relación de dependencia como el que esta de colaborador, es: hago las fotos, los medios las seden en gentileza, las revenden, se ven publicadas en otros medios; usos extendidos no autorizados o si autorizados, bueno, donde estamos parados en relación a esto.

Otro de los temas es: nos hacen firmar derecho donde cedemos todo. Ahí esta la problemática: que es dentro de lo profesional, lo legal, que podría correr por cuenta de lo de derecho de autor, y dentro de lo gremial, lo menos profesional, pero que corre por cuenta de lo que es lo sindical. Hay parte donde se cruzan. El tema era poder discriminar, esto pasa por acá y esto pasa por allá. La sensación era que hacia falta una herramienta ya, para poder saber como salir de esta situación.

Yo creo que hay una situación propuesta, que era tratar de tomar conocimiento sobre lo que producimos, lo que somos y lo que hacemos, porque el estar situados en un lugar nos permite bueno…hacemos otras tareas, queremos percibir dinero por esas otras tareas y hablamos de lo gremial. Pero aparte, la tarea que nosotros hacemos tiene usos comerciales (un diario es comercial, por mas que sea periodístico) y eso también nos acompaña en el poder reclamar nueva remuneración, nuevos subsidios, etc.

Soluciones ya, no hay; si hay una ley que ampara, no todo. Es un camino a construir, pero desde que se firman convenios internacionales (están firmados) y solamente no se están poniendo en practica y por “usos y costumbres” los diarios están avasallando y nosotros por desconocimiento no estamos yendo a reclamar, o a decir “mira que yo se que lo que estas haciendo no corresponde”. Hay otros países donde las condiciones son distintas y como la ley es total, se puede avanzar lentamente en ese sentido; con tiempo y sin exponerse; negociando; no es buena la industria del juicio. Es mejor ser respetado como un profesional desde un inicio; el juicio vendrá después cuando, claramente, habíamos pactado y no fue respetado. Pero ir directo al juicio no.

Es importante tomar conocimiento. Desde ARGRA se realizo un folleto con la explicación del derecho de autor y ahora se están llevando una explicación sobre una posible construcción de factura. La propuesta es cambiar las palabras que usamos; es decir, usa las palabras correctas: “autorizo el uso” etc. Y también construir, en la medida que no puede, si no es para el medio en el que uno trabaja, sino en simultaneo, para otro lado, empezar a construir facturas reales sobre lo que hacemos, para poder incorporarlo y tomar conciencia de lo que estamos cediendo. Es esto; hacer uso de un vocabulario correcto, que es lo que nos llevaría a esta conciencia.

No creo en la industria del juicio; no creo en la exposición; no creo que alguien tenga que perder el trabajo si esta en relación de dependencia. ARGRA quiere dar a difusión y tiene planes estratégicos para que los editores o gente de las redacciones tome conocimiento, o recuerde, o sepa que nosotros sabemos, que hay condiciones que están transgrediendo

Raúl Ferrari : Bueno, como decía el flaco, esto no es una conclusión, sino parte de lo que estuvimos hablando con el grupo. Nosotros como asociación, desde hace un año venimos con la campaña de derecho de autor, usando el lema de “Toda fotografía tiene autor”, creo que ya lo tenemos bastante incorporado. Bueno, ahora hay un plan de salir, con cartas a todos los asociados, otra vez recordando esto, con algunos puntos, y mandarlas también a los editores, a los jefes de redacción de cada medio, a los dueños de los medios, recordando desde la asociación que hay una ley que nos protege y que queremos que se cumpla. Veremos cuales serán los puntos, pero eso nos va a venir bien a la asociación y a todos nosotros, saber que tenemos derechos individuales y que tenemos un colectivo que es la asociación que esta otra vez refrescando que se tienen que cumplir. Sabemos que para que las leyes se cumplan, a veces, es una cuestión de poder, o de negociación, o bueno… hasta que se les ocurra, o hasta que no lo puedan hacer mas. Entonces, el primer paso seria hacer una campaña con cartas, y sobre todo tiene que haber un compromiso de los que participamos acá y extenderlo para que se refresque eso.

Yo creo que después de este encuentro nacional, que tuvo difusión periodística, saben que algo estamos tramando, así que este es uno de los pasos que vamos a estar dando institucionalmente. Sobre todo va a quedar en cada uno, no para que salgan a discutir inmediatamente, pero para que se vaya generando.

Ademas, en breve, ya va a estar entrando el proyecto de modificación de ley para que sea tratado. Estuvimos viendo todas las aristas y ya esta listo. Informaremos, porque va a ser importante; creo que lo vamos a poder hacer. Nada más

PB: Es muy importante la participación de los socios del interior, por sus representantes locales y la llegada que ustedes puedan tener. Es un proyecto de ley que elaboraron los abogados de ARGRA y estaría bueno que cada uno en su región, en su zona, en su provincia, con lo representantes ya sean diputados o senadores, les acerquen el proyecto este, que en su momento vamos a alcanzárselos a todos, para hacer fuerza a nivel nacional y no solo en capital o en le congreso.

Queda la ultima, la final, que es la organización nacional de los reporteros gráficos, que la coordinamos con el amigo Daniel Vides y con la participación mayoritaria de los colegas del interior del país, aunque hubo muchos colegas de Buenos Aires que ayudaron a diseñar esta secretaria.

Quería agradecer en forma personal (pero creo que va de parte de todos) a los colegas y compañeros que se pusieron el encuentro al hombro. Me refiero a Victoria Gesualdi y a Ezequiel Torres.

En la comisión de organización nacional, la conclusión principal que sacamos y que unánimemente se dijo, es que podemos organizarnos a partir de considerarnos parte del colectivo ARGRA. Sabemos de nuestro oficio la parte individual (cuando obturamos estamos solos), pero somos parte de un colectivo; a partir de saber a donde queremos pertenecer, es que va a ir surgiendo sola la organización.

En el tema organizativo concretamente, se propuso, como uno de los temas centrales, dividir el mapa de los asociados del país en zonas. En la actualidad algunos lugares vienen produciendo, o ya se produjo, como los compañeros del NOA o en el sur, que tienen comunicación. El resto, a partir de este mapa que se diseñe, con los socios que tenemos en las distintas provincias, creemos que va a alimentar la comunicación y el intercambio en cada región.

Se habló de la necesidad de encontrar un medio de comunicación que integre a todas las provincias. Esta tarea, como ya nos comunicó la secretaria de redes de comunicación, están diseñando no se bien que, pero dijeron que nos prometen algo a través de lo cual nosotros nos vamos a poder integrar y comunicar diariamente. Esta era un de las deudas pendientes. En su momento hubo una rediagramacion de la pagina Web, pero nunca alcanzó y no pudimos integrarnos realmente a través de ella. A través de este nuevo medio de comunicación se propuso no solamente intercambiar opiniones, sino hacer talleres de formación o simplemente charlas semanales donde podamos opinar sobre que es lo que esta pasando en cada lugar.

En este nuevo mapa, se propone organizarse localmente con delegados, no importa el numero; que cada uno proponga la cantidad y su forma de organización local. Lo importante es que esto sea para producir una mayor fluidez entre todos los socios del país. Creemos que de esta manera, ARGRA organizándose localmente y no solamente en la capital federal, vamos a poder tener mayor crecimiento y poder responder a las necesidades locales.

Se propuso, en esta búsqueda de nichos, por parte de un compañero que es presidente del sindicato de prensa de Neuquén, profundizar la relación con los sindicatos de prensa locales. Ya se estuvo haciendo en Córdoba y Santa Fe. A partir de que nosotros somos trabajadores de prensa, podemos aumentar la fluidez de nuestro contactos con ellos con vistas a desarrollar los trabajos que consideramos que los reportero gráficos debemos hacer

A partir de esto, en el caso concreto que está sucediendo en algunas ciudades, hablamos de desarrollar muestras locales. Creemos que es una forma de aglutinar, organizarse y relejar los trabajos de los reporteros gráficos en cada zona. Cabe la aclaración que existe una muestra anual de reporteros gráficos, que este año va a cumplir 30 años. Sabemos que con esto no alcaza.; por su forma organizativa y la cantidad de reporteros gráficos que somos en el país, para que todos puedan exponer sus trabajos realizados.

En esto, nos encontramos con una buena alternativa, que va de la mano y que no es incompatible con el trabajo que venimos realizando, para que cada región pueda exponer el trabajo que esta desarrollando. Una de las ideas que aporto un socio, es aprovechar todos los medios posibles para desarrollar las actividades de charlas, conferencias, cursos de capacitación o muestras fotográficas. Para esto hay que agotar todos los recursos, hablar con los dueños de los diarios, las secretarias de cultura etc.

Aunque parezcan unos puntos sencillos, es una tarea faraónica, pero es el puntapié inicial que queremos dar en esta nueva etapa a partir del crecimiento que tuvo la asociación en las distintas provincias del país. Creo que era una deuda pendiente; necesitábamos una nueva reestructuración a través del nuevo mapa de socio que tenemos y la realidad esta reflejada en este encuentro. Vemos que las provincias aportaron el mayor caudal de capacidad, inteligencia y organización.

Quiero agradecernos a todos por haber participado. Buenísima la colaboración; buenísima la onda que estuvimos recibiendo todo el tiempo. Es un acto fundacional; solo nos queda seguir creciendo, ir para adelante y superar los nuevos desafíos que tenemos como fotoperiodistas.

Gracias a todos

* La mesa debate se realizó el 10 de abril de 2011 en el marco del 1er Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapadmalal.

Desgrabación: Miguel Goya

 

FRAGMENTOS DEL DESGRABADO DEL TALLER Daniel García*

Somos periodistas

Somos todos fotógrafos, pero trabajamos todos en prensa, somos reporteros gráficos. Entonces la cosa es: ¿para qué fotografiamos? Estamos fotografiando para informar, entonces somos periodistas. Nosotros mismos nos ponemos en un lugar de no periodistas cuando distinguimos entre periodista y fotógrafo. Esto es algo que hay que profundizarlo y plantearlo todos los días porque nos autoexcluimos del periodismo, en el que ya no estamos, tanto para los medios como en el concepto social. Si uno lo discute con alguien de la redacción la mayoría va a decir que sí somos periodistas, pero en la práctica concreta y en la consideración interna y en la que manifiestan los representantes institucionales del periodismo en la Argentina, estamos excluidos del proceso informativo.

A mi no me parece que la categoría de periodista sea mas alta que la de fotógrafo, no es eso. Pero hay una relación de poder en la que el que escribe decide sobre el perfil de la noticia, o que es lo importante, y el fotógrafo acompaña. No me parece que sólo sea semántica, es algo que tiene una conexión directa entre la definición y lo que somos. Es algo que tenemos que trabajar, tenemos que empezar a hacerlo en todos los frentes, constantemente, con la gente común, en las redacciones.

Cuando nosotros podamos asumir el rol de periodista íntegramente, vamos a poder quizá también fotografiar de otra manera, porque las propuestas que sean, no van a ser pensadas por alguien que no piense la imagen. Nosotros pensamos centralmente en la imagen, y en una imagen que este vinculada con la información que queremos brindar. Tenemos que trabajar para ver que podemos hacer, nosotros, para ponernos en el lugar que creemos (por lo menos yo) que nos corresponde.

garcia1

Autor: Damian Dopacio

Nuestro lugar en los medios

El fotoperiodismo en la Argentina tuvo altas y bajas. Hubo momentos en que la imagen que nos gustaba se producía y publicaba, y otros momentos en que no. El problema que tenemos cuando no nos publican la foto que queremos, que nos gusta, es que además de enojarnos, nos frustra. ¿Qué pasa que cuando nos eligen la foto nos vamos contentos a casa y cuando no, nos frustramos? Había uno que decía que se fotografiaba con el ojo, con el corazón y el cerebro. Me parece que en este caso estamos reaccionando sólo con el corazón. Me parece que es esencial, pero quizá es hora de poner un poco mas de cerebro a ver que pasa con el que elige la foto: ¿Quién la elige? ¿Cómo la usa? ¿Cómo la manipula con la palabra que le pone al lado, la volanta, el epígrafe, lo que sea? Y a partir de todo esto, ver como nosotros podemos estar contentos o tristes (pero no frustrados) entendiendo el proceso industrial de producción de la noticia y en que forma nosotros estamos insertos en él, y de que manera esto se puede ir modificando.

De lo contrario, la frustración tiene dos lados: uno es la situación personal, ya que todo este desgaste te lleva a que una profesión que amabas y que hiciste un montón de sacrificios para entrar y desarrollarla, termina siendo no tan atractiva. Empezás indefectiblemente a pensar en ponerte un kiosco, manejar un taxi o cualquier otra cosa. A mi me ha pasado, les hablo con mi experiencia propia. Y por el otro lado hay un tipo menos que jode ahí adentro, hinchando las pelotas con qué es lo que hay que mostrar, cómo hay que mostrarlo, etc.

La delgada línea entre lo profesional y lo sindical

En este trabajo existe una situación compleja que es la delgada línea que divide la parte profesional de la parte sindical. No digo sindicalismo como dirigentes, sino como acción de lucha para conseguir ciertas reivindicaciones. Cuando yo era más joven un colega me dijo que lo mandaban a hacer muchas notas seguidas, y no tenía ni tiempo de pensar y reflexionar y sacaba cualquier cosa. Eso es una lucha sindical, un derecho como trabajadores, que somos todos obviamente. Pero en la parte profesional uno tiene que hacer la mejor foto que puede, si no saboteamos voluntariamente nuestro trabajo en vez de encarar la lucha por el camino correcto que sería, por ejemplo, en vez de hacer 5 notas hago 3, pero las hago bien. Quizás en otras profesiones está muy bien marcada esa línea, pero en la nuestra no.

Calidad vs. cantidad

Ahora hay muchos fotógrafos buenos o muy buenos que están trabajando en prensa, que cuando yo arranqué no había. Ahora, ¿qué pasa que teniendo las nuevas generaciones de fotógrafos, que tienen una habilidad o un talento mucho más desarrollados, que se preocupan, que estudian, que se informan, seguimos estando en esta situación? Tenemos cámaras maravillosas, tenemos posibilidad de fotografiar prácticamente en cualquier situación (técnicamente hablando), tenemos posibilidad de usar un montón de espacio en nuestras tarjetas, etc. pero estamos haciendo exactamente lo mismo que antes: estamos siendo el soporte de un proyecto que lleva adelante otro. Mas allá de la fotografía autoral y de los proyectos personales. Yo no se cuantos de acá están en relación de dependencia, pero imagino que la mayoría. O sea, un fotógrafo que tiene una agencia propia y tiene su personal, probablemente pueda tomar decisiones diferentes. Cuando uno esta inserto en un medio, la cosa tiene esta complejidad.

En la primera discusión que se dio en el medio específico donde yo trabajo, que son las agencias, hay dos bandos: los de la cantidad y los de la calidad. Yo estaba y estoy en los de la calidad, y perdimos. Hace treinta y pico de años que trabajo, y de todas las luchas perdí como mínimo el noventa por ciento de las veces. Esta proporción se puede mejorar o empeorar, y el triunfo o el fracaso en las cosas coyunturales no tienen demasiada importancia porque tenemos que seguir insistiendo. Si nosotros no somos el motor del cambio, nadie se va a mover por nosotros porque no les hace falta. Es más, que los fotógrafos piensen y tengan imágenes de buena calidad, muchas veces les sirve, pero muchas más les jode. Porque la idea sigue siendo que la imagen está para soportar lo que están escribiendo, cualquier foto sirve, si no opina lo contrario.

Cuando se prioriza la cantidad pasan dos cosas que afectan a la imagen: 1) hay una catarata de imágenes que impide a los editores tener acceso a todo el material. Es imposible para cualquier medio tener editores para poder ver todo el material que se produce; no da el tiempo. Esto hace que los editores estén en una situación compleja, porque ¿sobre qué están editando? En general, la única forma en que un editor fotográfico pueda resolver eso, es que alguien venga y le diga “che, en tapa va a ir lo de Irak”, entonces en vez de mirar tres mil, tiene que mirar trescientas, que igual no es poco, pero se pude hacer. Ahora, en ese caudal de fotos van muchas cosas; muy buenas, regulares, malas también. Lo que sucede en ese tsunami fotográfico es que las fotos terminan siendo cualquier cosa. El editor termina diciendo “estoy harto, pongo esto”

Lo que yo veo es que esta cantidad es muy valiosa, desde un punto de vista comercial, yo no digo que hay que oponerse a esto; digo que vamos a ver que es lo que genera esto, y como podemos modificarlo. Genera que las fotos no se ven. Dentro de la parte periodística tiene otro aspecto ganador, el hecho de que un texto se lee mucho más si tiene una imagen al lado. Esto hablando sobre todo en la Web, pero también en los diarios impresos. Esto me resulta bastante complejo, pero parece que hay un crecimiento de la imagen en los medios; obviamente un crecimiento en la sociedad, en la comprensión y comunicación a través de las imágenes. No creo que la palabra se termine, ni creo tampoco que haya periodismo sin palabras, pero hay un crecimiento de la imagen, tanto en el volumen como en influencia dentro de un medio. Por ejemplo, en las agencias esto se puede medir y en los periódicos también. Ese volumen de imágenes sirve para que cualquier cosa que se escriba pueda tener una ilustración.

Hay un fenómeno contradictorio y que abarca todo. La producción de las agencias hoy es más que nada productos web. Lo que está pasando es que la fotografía está ocupando cada vez más lugar, es la que genera más recursos. Entonces, a mayor crecimiento de la fotografía, mayor preocupación en la parte del texto, porque muchas veces pasa que el cronista te dice “haceme una foto de esta nota, porque sin la foto no me la publican”. Pero ahora ya empieza la etapa del miedo a decir “che, ¿y esto cómo va?”, porque el crecimiento de la comunicación social con la imagen toma cada vez más protagonismo. Hoy casi todo el mundo es fotógrafo, no digamos desde el punto de vista profesional, pero ejerce de alguna manera la fotografía o el video para cosas familiares, redes sociales, etc. O sea, todo el mundo saca fotos, y la gente le va tomando el gustito y empieza a mirar”.

La imagen y la palabra

Acá tenemos otro problema con la estructura de la sociedad y la educación. Cuando vamos a un jardín de infantes, lo primero que nos enseñan es a dibujar. Una de las cosas que se empieza a dibujar son letras, y las letras luego se convierten en palabras cuando se entrelazan. O sea, que hay un proceso en el que la civilización considera que es importante saber leer y escribir. No hay ningún proceso educativo que incluya la lectura de la imagen; no existe, salvo en niveles terciarios. O sea que, más del 90% de la población, no puede leer imágenes más que de una forma intuitiva. Entonces, obviamente, el que puede leer texto, va a entender la comunicación desde ese punto de vista, que es la mayoría.

Esto trae consecuencias. Nosotros vemos fotos publicadas en tapa de un diario, y decimos que son una mierda. Y tenemos algunas consideraciones que hacer, incluso se hacen reuniones entre fotógrafos para opinar sobre las imágenes publicadas en los diarios. Pero nunca vamos a ver en un diario un titular que diga “Ban asia avajo”, pero sí fotos que están escritas así, miles. No va cualquier título en la tapa, pero sí cualquier foto.

Hablando sobre la cuestión de la imagen y la palabra, se da el caso de los noticieros televisivos en la Argentina y la presencia de los video-graph. Estas inscripciones están tomando más de un tercio de la pantalla. Y no es que la imagen se conserva entera, pero mas chiquita; sino que las inscripciones están sobre la imagen (”urgente”, “repetimos” etc.). Lo que hace la tele es una revalorización de la palabra ante el avance de la imagen como herramienta comunicacional. ¿Por qué, cuando un medio que tendría que ser imagen y sonido, ahora ya es imagen, sonido y palabra escrita? Entiendo que hay gente que no escucha, lo que obviamente no esta mal; entiendo que les viene bien comercialmente, porque por ejemplo en un bar ponen un canal de noticias y sacan el volumen. El problema de esto, es que el concepto de información a través de la imagen se pierde, porque la información no se da, porque esta tapada.

En muchos otros casos, como la utilización de estos nuevos no-empleados pero si proveedores ad-honoren, que tan bien existen en los medios escritos pero que esta fundamentalmente arraigado en la televisión, es que esta mal filmado, en muchos casos con celulares, todo movido etc. El problema en estos casos es que el espectador nunca ve lo que supuestamente, según los textos en pantalla y lo que dice el locutor, debería ver. Esto me preocupa porque si en la escuela no les enseñaron como mirar imágenes y un medio masivo difunde esa calidad de imágenes, lo que estamos haciendo es repudriendo la capacidad de la mayor parte de la gente para poder ver y empezar a comprender a través de las imágenes. Estamos en una crisis que en este caso nos afecta a nosotros, pero que afecta al periodismo en general; el proceso informativo tiene falencias que son graves porque lo invalidan como tal. Estamos intentando “hacernos” los que informamos, pero en realidad no informamos. Creo que todo el mecanismo de todo este proceso seudo-informativo lleva a que la imagen, y por tanto todos los productores de la misma, sean simplemente no los protagonistas de la obra, sino los personajes secundarios.

Hay cosas que no son controlables y hay que aceptarlas así, lo cual no quiere decir que coincidamos. Desde nuestra perspectiva tenemos que tratar de modificar todas éstas cosas que nos están molestando. En el punto éste quiero hacer un alerta. En el proceso histórico de los cambios en la prensa, especialmente la prensa escrita que de alguna manera es la más antigua, ha habido profesiones que han desaparecido. Por ejemplo el tipeador, que ya no existe. Y esto se dio por los cambios tecnológicos que fueron apareciendo con el correr de los años. También los correctores, los laboratoristas. Entonces, la primera víctima es el laboratorista, y la segunda víctima en extinción, para mí, es el editor. Desde mi punto de vista, el editor fotográfico tiene los días contados, si se sigue en este proceso conceptual y con avances tecnológicos. Porque en realidad ya no sirven para nada. Si tiene que editar el trabajo de siete fotógrafos en el diario, que le traen 500 fotos cada uno, están con el mismo quilombo que el editor internacional que tiene 3 mil.

En los diarios se da una cosa que para mí es muy buena que es que el fotógrafo hace una preedición, no en todos pero en muchos. Algo que está bastante bueno porque ya le da por lo menos todo lo que apretó a su propio juicio de más, y ya se acota la cosa. Lo importante del espacio de reflexión es ver que hacemos con todo esto que tenemos. Primero fueron los laboratoristas, ahora los editores. Lo que quieren es que les manden muchas fotos, para poder elegir “a la carta” lo que les sirva a su propósito. ¿Pero quien elige? El que escribe, elige lo que el quiere “ilustrar” en su texto.

Lo importante es que tengamos una visión estratégica, porque no vamos a lograr los cambios ya. Pero este encuentro hace unos años era imposible conseguirlo. No es que estamos paralizados, en todo caso estamos mal. El asunto es no parar, hay que seguir movilizados porque la problemática esta es cambiable. El asunto es ver cómo nos insertamos en la estructura de los medios, en una posición en la que la fotografía o la imagen puedan tener un poco más de relevancia, u ocupar el lugar que nosotros deseamos o nos gustaría. Porque ahí es donde el cambio puede ser un poco más profundo, o podemos seguir profundizando un cambio que va de una manera lenta y con altibajos.

* Fragmentos desgrabados de los talleres coordinados por Daniel García del viernes 8 de abril a la tarde y el sábado 9 de abril a mañana en el marco del 1 Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapdmalal realizado en 2011. El taller fue un espacio de discusión regido por la dinámica de la oralidad. Decidimos editar las ideas principales para que fuera comprensible en este formato.

Desgrabación: Fabian Induti y Miguel Goya

FRAGMENTOS DESGRABADOS DEL TALLER

Hice una convocatoria pública para aquellos que quisieran mandar fotos, que las enviaran. La convocatoria era mandar doce fotos sobre un sólo tema o sobre varios, y que asociaran con la frase “Ni objetivos ni neutrales”. Era una decisión absolutamente personal. A mucha gente le costó decidirse y tardó un tiempo en enviarlas. Incluso muchos me hicieron preguntas, yo no respondí ninguna. Parece que cuando te dan una libertad total es como estar al borde del abismo. Esa es la primera conclusión que saqué, que no estamos acostumbrados a manejarnos con ninguna libertad. Les puedo hablar de algunas proporciones estadísticas: la mayoría se siente mucho más representada en su opinión cuando es un reportaje extenso, mientras que la minoría se siente más representada en las noticias de todos los días. Y hay un grupo especial que es el de los mas viejos, que fue muy particular porque la gente de mi edad o más, mandaron fotos de hace veinte años. Evidentemente, ellos se sienten más representados con lo que hacían cuando eran jóvenes o porque en esa etapa del país encontraron algo muy especial.

Lo de los reportajes no es casual porque en general en donde empieza a definirse la opinión es cuando se decide qué se hace, qué tema expongo. En general los reportajes, a pesar dentro de la estructura de un medio, hay mucho de propuesta individual. En algunos lugares pueden conseguir ese espacio que se les de, y es evidente que se sienten más representados así que por ambigüedades siempre presentes en una sola foto de noticias. De todas maneras, el poder de la imagen se juega más que nada en las fotos de noticias. No por nada los play de las agencias de noticias son siempre de las fotos publicadas impresas en papel, y sobretodo en las portadas, donde es mucho más difícil entrar con la opinión del fotógrafo, que con la del patrón.

Esto de la objetividad ya no se lo cree nadie, ni siquiera los que la proclaman y la piden. En general, cuando un editor de un diario o una revista te dice “me parece que tu foto no fue objetiva” es simplemente porque no respeta la visión del diario, que no quiere decir que no sea objetiva, pero es la opinión del patrón. Yo lo que les pido ahora es que proyectemos las fotos que envió cada uno, y luego de la proyección de cada autor debatimos un poco. En la fotografía es muy importante la parte de la reflexión sobre las imágenes. Yo el otro día me puse a seleccionar doce fotos mías, y nunca lo había hecho en veinte años de carrera. Me fue muy difícil. Si quieren tomar nota me parece muy bueno, y si me las quieren enviar también porque va a ser un aporte muy grande cuando yo escriba sobre el taller.

Se está produciendo un fenómeno bastante interesante que son las alternativas que encuentra uno para expresarse cuando uno está muy coartado todos los días en el trabajo, y a lo largo de los años descubre que en realidad no se expresa un carajo haciendo fotos para un medio. Hace años que ya viene con la Polaroid, el teléfono, etc. Pero ahora se está masificando con el IPhone, porque parece que uno se compra un IPhone y se enamora perdidamente. Entonces hay mucha gente haciendo fotos durante los reportajes para sí mismos. Daría la impresión que cuando desaparece el periodismo, aparece otra cosa que ustedes ya le pondrán nombre.

a muchos nos pasa esa dicotomía de la foto objetiva que quizá publicamos en los medios, y después terminar produciendo eso también que está buenísimo (En referencia al trabajo proyectado realizado con un iphone). Es medio esquizofrénico vivir con esa…como una duplicidad de personalidad sería…

Participante: “Hay veces que pasa de ir a cumplir con la nota o el pedido, y justo te encontrás con algo que te da gusto hacer y no sabés si volver una vez terminada la nota, o hacerlo en ese momento. Sin querer estás con esa presión de no saber si hacerlo o no en ese momento, y eso es una forma de “autocoartarse”.

JS: Hacelo en ese momento porque después no sabés si vas a volver. Hay hasta algunas oportunidades donde hay una intersección, entre que el medio no tiene otro remedio que publicar lo más cercano a lo que vos ves, y tiene la necesidad de la foto que a vos te gusta. Son pocos, y mirá que yo llevo treinta años trabajando y fueron muy pocas las oportunidades. Si las aprovechás te das cuenta que existen, y si las desaprovechás no te queda otra que no hablar. En general los diarios se la pasan mintiendo, pero para que la gente les crea las mentiras más importantes que están en las secciones de política, economía, etc., tiene que haber muchas verdades también, y para eso nos usan a nosotros. Nosotros hacemos más creíbles a los medios, cumplimos una función que no nos gustaría tener que cumplir. Pero es así, porque si uno va a un medio de conjunto, está muy repartido el trabajo. Y esas son oportunidades que se deben aprovechar, sobretodo para los reportajes. Esos trabajos a lo largo son nuestros mayores orgullos, porque cuando una foto que te gusta mucho llega a la tapa de un diario, es algo maravilloso. Hay que estar muy despiertos porque siempre se pueden dar esas posibilidades.

Yo les envié dos fotocopias: una se llama “Moral y Fotografía” (de Sontag), y me gustaría que cuando tengan tiempo lo lean. A mi me hizo entrar muy en crisis este texto y me costó bastante recuperarme. Siempre pienso en la inestabilidad de la estética, hay veces que la estética alinda demasiado la foto, en situaciones demasiado terribles.

Con respecto a lo que se decia de la esquizofrenia, nosotros no somos ajenos al tipo de esquizofrenia que se da en la gente generalmente cuando mira las fotos de los diarios. Me parece que nosotros lo vivimos doblemente, no sólo porque vemos los diarios, sino porque a veces estamos en esas situaciones. Y esas situaciones no son gratuitas, sino que van mellando en tu psicología para que puedas vivir. Somos los que tenemos el callo más grande. Y por otro lado, la obligación de ser sensibles. Esas tensiones las sufrimos todos, y cuando más te metés, más te hacés pelota.

P: A mí lo que me pasa un poco es que perdí el entusiasmo de trabajar para los medios. Por ahí no estoy mintiendo yo, pero el trabajo que hice, al otro día va a ser parte de una mentira o una gran mentira. Sin embargo, la mayoría de mis trabajos de autor surgieron a partir del diario. Eso sí, para mi es una herramienta fundamental trabajar en un medio porque me da la oportunidad de conocer historias y buscar cosas para hacer.

JS: Me parece que eso se da en todo ámbito. Yo estoy haciendo casamientos ahora porque me viene muy bien el dinero y los hago de una manera particular que a la gente le gusta y los vendo. Y cada vez estoy haciendo más fotos para mí en los casamientos. Entonces me di cuenta que hasta en los trabajos más mercenarios que uno puede hacer, uno encuentra cosas para uno, si es capaz de ir viéndolas, haciéndolas, y guardándolas.

Pasamos a otro trabajo, este es el texto de….: “Cómo hacer fotoperiodismo sin caer en la fórmulas que a diario nos imponen los medios y también los principales certámenes como el Worldpress. Tendríamos que comenzar pensando cuáles son nuestros intereses sobre los temas que elegimos, y más profundamente pensar en por qué decidimos ser fotógrafos. En mi carrera de casi 20 años como fotoperiodista no he dejado nunca de sorprenderme, pues cada vez que me veo enfrentado a ver qué es lo que el ciudadano común y corriente selecciona, o destaca de entre las millones de imágenes con las que convive, casi siempre su elección es muy sencilla. ¿Pero qué es realmente lo que sucede entonces? En mi modesta opinión, lo anterior se refiere a lo equivocado que estamos en torno a los preceptos que nos mueven como fotógrafos. Nada más sabido que en nuestro día a día, la búsqueda por la imagen más impactante, la que contenga mayor información, la que tenga la mejor composición, o simplemente la que nos llene más como profesionales, es la que sentenciamos como la mejor. Lejos de eso, a la mayoría de la gente no le pasa nada con esas imágenes que con tanto esfuerzo hemos hecho. El padre del fotoperiodismo Eugene Smith decía que “pongo tanta pasión en mi trabajo fotográfico que, más allá del arte por el arte, prefiero saber que mis fotografías empujarán a alguien a la acción, a hacer algo para resolver algo”. Qué difícil es entonces hoy renunciar al ego que tenemos, y poner exactamente en la mira del lenguaje, en una línea tan sencilla que permita transmitir un mensaje sin quedar atados en los modelos insensibles que la gran industria del periodismo nos ha impuesto. El conjunto de imágenes que verán a continuación, es de alguna forma un intento para escapar de mis propios tormentos, de aquellos que por años han regido mi mirada y de alguna forma también han (Inaudible) mi opinión como ser humano. Como formato utilicé el teléfono celular, pues he encontrado la forma de reducir todo únicamente a la mirada”.

Tengo la sensación de que los medios se están empezando a avivar de esto. Porque hubo un premio muy importante, no se si el Worldpress u otro, a un trabajo con un celular de Afganistán creo. Dentro de poco va a ser una alternativa menos. Una anécdota muy buena que tengo es cuando tuve que ir a hacer un torneo Sub-20, que son campeonatos muy aburridos porque no conocés a ningún jugador (risas) en Ciudad del Este. Es una ciudad medio brava, porque se mueven millones de dólares por día en la calle, hay mucha gente armada sin uniforme policial…una situación medio fuerte. Entonces a la calle salía con el teléfono por miedo de que me roben la cámara y después no podía hacer el partido. Entonces la única diversión que encontré ahí fue pasear con el teléfono por Ciudad del Este. Entonces hice un colage como de 20 fotos. Un día hablando con un amigo él me dice que se las envíe al jefe a ver qué le parecían. Se las mandé, y me respondió “están buenísimas, mandame las grandes” (risas generalizadas). O sea, jamás entendió que las hice con el celular. Y yo le contesté “¿qué grandes? Son esas las imágenes”, a lo que me retrucó “ah no, entonces hacé un reportaje con la cámara”. Me callé y fui a intentar hacer lo mismo pero con la cámara, e incluso me tomé más días. ¿Y saben qué? Nunca me salió. Tuve otras cosas es cierto, pero la frescura que tenían las fotos que yo hice sin ningún interés por publicar, no lo tenían ni en pedo las de la cámara. Es impresionante la efectividad del experimento”.

Este trabajo se llama “De Frente”. Leo el texto porque me parece interesante (de Nicolas Pousthomis de SubCoop). “Ese día no sólo hice fotos. Tuve que correr, pelear, levantar gente herida, armar barricadas, y sin embargo, tengo las mejores imágenes que hice en mi vida. Es un conjunto de fotos tomadas con una cámara vieja, por la que entraba luz, y que trababa los rollos en medio de las tomas. Una Nikon EM, que la conseguí por cincuenta pesos, fue la cámara que me enseñó a trabajar y ese día, sin darme cuenta, fue mi primero como reportero gráfico. A partir de ahí, empecé a ganar plata con las fotos que hacía en las calles y en las marchas. Vislumbré entonces que podría en algún momento dejar de hacer cumpleaños de quince y otras tranzas, que para colmo me salían muy mal, para vivir de la fotografía de prensa. Esas fotos, del 19 y 20 curiosamente, me cerraban aún las puertas por las que quería pasar. Y se me abrieron puertas que jamás me imaginaba. Las puertas que se cerraron fueron las de las redacciones de los diarios y agencias de noticias, que enseguida me catalogaron como fotógrafo piquetero. Por ende, sin estatuto del fotógrafo profesional. Después de un tiempo de forzarme para entrar, decidí quedarme del lado en el que sí había disfrutado de mis fotos, y no estaba tan seguro de querer formar parte del rubro en el que algunos sólo sacan fotos por dinero. Había conocido un espacio donde la fotografía tenía significado y servía para algo. Alguna gente necesitaba de verdad las imágenes y no podían pagar por ellas. Pero eso no me hacía menos fotógrafo. Me banqué no ser nadie para la gente de mi entorno cercano, familiares y otros fotógrafos que creen que tienen la chapa de Clarín. Me quedé en el mundo que me había adoptado, y su criterio era el que me importaba a la hora de juzgar mi propia fotografía. (Inaudible), incipiente y combativa, era una red que permitía hacer algo en grupo, y de paso ocuparse de uno mismo. Era la herramienta ideal para que los fotógrafos puedan publicar sus fotos sin intermediarios, armarse una página personal y, por qué no, juntarse con otros para armar algo colectivo. El 20 de diciembre nos había enseñado que lo que uno sueña se puede concretar. También nos había mostrado lo potente que era la acción colectiva al poder unir fuerzas. Me acuerdo que en medio de los saqueos renuncié a hacer la (Inaudible) de mis sueños sólo para preservar auténticas las razones de estar ahí. Vivía en aquel entonces a la vuelta del negocio Nikon y pasaba por delante todos los días. Vendía empanadas ahí cerca, y siempre miraba la vidriera para ver qué tenían de nuevo. Para diciembre de ese año, habían colocado en un trípode una de las primeras réflex digital, la D100 o la D1, no recuerdo. No me acuerdo, porque la verdad no tenía la más mínima esperanza de poder conseguir una. Tenía esa cámara vieja que me dieron alguna vez inventada para llevar a Vietnam. Simple y rústica, para que los soldados la puedan usar sin necesitar conocimiento sobre fotografía. El 20 de diciembre, ya después de anunciada la renuncia de De La Rúa, la calle Corrientes se transformó en un gran shopping a puertas abiertas, con las cortinas metálicas de los negocios cediendo una a una bajo el paso de los manifestantes. Había un espíritu de camaradería impresionante, comparable en un punto con los festejos de los mundiales de fútbol. Con la salvedad que éste lo habíamos ganado nosotros, y en la calle arriesgando la vida. En la euforia del momento me quedé frente al negocio Nikon esperando que le toque el turno (risas generalizadas). Vi cuando lo empezaron a abrir, y en mi hubo algo que se negó a ir en búsqueda de esa cámara que necesitaba, y que de alguna manera me merecía. Finalmente seguí mi camino con la gente que había cruzado ese día pero sin la cámara. Lo mismo pasó frente al Musimundo, cuando la gente se llevaba los discos, o en Frávega donde la gente directamente se lleva televisores y electrodomésticos. La verdad, sentía que estaban en todo su derecho. Pero sentí que uno había puesto el cuerpo para la revolución, que preferí quedarme sólo con esa sensación y así no tener que dudar de mis intenciones de quedarme ahí luchando. Revelé los rollos esa misma noche en mi departamento, y les mostraba a unos amigos los negativos recién salidos del laboratorio. Había grandes partes de los negativos arruinadas por las grietas de mi cámara, pero sentí que algunas imágenes estaban ahí. Testimonios de un hecho histórico. Desde las entrañas, con la calle latiendo en unas fotos que expresaban con sus imperfecciones todo lo fuerte que fue. Tal vez tomo mejores fotos ahora con una cámara en condiciones, y quizás también con el tiempo mejore mi técnica, pero seguro nunca sacaré fotos tan buenas, fotos con cantos de alegría, gusto a sangre y olor a goma quemada”.

Evidentemente siempre hay una fotografía militante. También los sindicatos de los trabajadores o de otros sectores sociales necesitan de la fotografía, y la usan con fines totalmente militantes. En general hay un prejuicio muy grande de la sociedad hacia la fotografía militante conciente y declarada. De hecho yo fui fotógrafo dos años de un partido político, del diario del MAS, y a mí durante dos años me negaron la entrada a ARGRA por ser fotógrafo del MAS. La Comisión Directiva no me daba la credencial porque decían que yo trabaja haciendo propaganda, y era verdad, pero yo me sentía reportero gráfico. Y a mi me dolió mucho no poder tener la credencial de ARGRA todo ese tiempo. Como que el trabajar en un medio normal, era más reportero gráfico que alguien que trabaja para la militancia en un periódico de barrio, un grupo piquetero, etc.”.

Seguimos con los reportajes. Son dos reportajes mucho más largos, como de quince o veinte fotos cada uno. ¿Llegan a leer o les leo yo? (texto de Alfredo Srur): “Creo en la fotografía como un motor para encontrar mi verdad, si existe. No creo estar de acuerdo con ninguna imagen en particular, sean buenas o malas fotos. La comprensión del autor es directamente proporcional a la información que se tenga de él mismo, y su trabajo. Uno intenta transmitir una mínima parte del pensamiento propio. Las fotografías aquí presentadas son de la última década, y pertenecen a distintos ensayos de largo aliento y que han dejado huellas en la propia vida. Curiosidad, obsesión y técnica fotográfica.”

¿Se los leo o ven bien? (texto de Gisela Volá de SubCoop):”Sabemos que la fotografía documental a veces refuerza el ejercicio del poder que se ejerce sobre los sujetos fotografiados. Y eso que un fotógrafo comprometido no sólo intenta fotografiar temas que le signifiquen agua para su molino, sino que intenta reflejarlo a partir de lo que hay que festejar, y criticar lo que sabemos. La hipótesis de no ser ni objetivo ni neutral, creo que coloca al fotógrafo en un lugar por fuera de los recursos y sabiendas de lo que una publicación demanda. Sino que a diferencia, hablamos de una opinión, de una ideología que sólo el fotógrafo sabe frente a los temas que siempre enfrenta. Varias anécdotas me relacionan afectivamente con la fotografía o una serie, pero muchos otros puedo darme cuenta que sólo forman parte de una búsqueda de reflexión, y acercamiento a tales historias. Ciertamente, bajo un punto de vista nunca neutral, siempre partícipe. En la cooperativa que participo hablábamos en sus inicios de que el ojo debe aprender a escuchar antes que a mirar. Y ese camino, supongo, fue la mejor carta de presentación para poder entrar en la vida del otro. No conozco otro camino, y es así como comunicadora, que me parece la forma más honesta de contar a los demás”.

Yo lo único que quería con este taller es que empiecen a pensar un poquito en este tipo de cosas, y si alguna vez les pasa algo que refleja esta condición en la que están, escríbanla por favor y háganmela llegar de alguna manera. Porque no hay otra forma de aprender más de esto que si es entre todos. Es como una suma de experiencia la que nos va dando conocimiento en este tipo de cosas para lo que es necesaria tanta cantidad de elementos para analizar cada situación en particular. Y todo eso si no se escribe, so long”.

*Fragmentos desgrabados del taller de Jorge Sáenz dictado el sábado 9 de abril de 2011 a la mañana en el marco del 1 Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapdmalal. El taller se estructuró especialmente a partir de fotografías proyectadas, por lo que decidimos editar parte de las discusiones que no eran comprensibles sin esa referencia. Desgrabación: Fabián Induti

Proximamente subiremos fragmentos de otro día del taller.

FRAGMENTOS DESGRABADOS DEL TALLER DE JULIAN GERMAIN*

 

Taller de Julian Germain. Foto de Atilio Orellana

Autor: Atilio Orellana

Julian Germain: Yo empecé a hacer fotografía en la escuela, cuando descubrí que quería estudiar fotografía en la universidad me di cuenta que lo mío era más de tomar imágenes, antes que reflexionar y analizar las fotografías. Yo vivía en Nottingham, al norte de Inglaterra, y comencé a sacar fotos sobre el lugar donde vivía. Tener una cámara me daba acceso a involucrarme con la vida de muchas personas que tenía a mi alrededor, muchas veces sucedieron cosas que yo, de no tener una cámara, quizás no las hubiera vivido. De ahí en más, siempre mi trabajo fue con gente alrededor, tanto como protagonistas de las fotos, como en colaboración o realizando proyectos. Para mi la fotografía es una experiencia social.

Sobre el trabajo: “Steel Works”

Esta es la historia de mi primer libro. Un amigo venía de Consett, un pueblo del Condado de Durham, al noreste de Inglaterra, y allí había una planta de acero. En 1980 cerraron esa planta, y comenzaron uno de los proyectos de demolición más grandes de Europa. El pueblo donde se encontraba la planta no era muy grande, pero la mayoría de sus habitantes trabajaban en ella. Lo que se ve en la foto es donde estaba emplazada la planta. Yo empecé a fotografiar allí entre 1985 y 1986.

Realizaba largas caminatas recorriendo el perímetro de la planta y conocía gente que me invitaba a sus casas y realizaba las fotos. Intentaba utilizar un mínimo de texto, ya que me oponía a que las fotos tuvieran mucha explicación. Las fotos a veces son muy complicadas, y si no hay una mínima descripción no sabés de qué habla. Entonces un ejemplo de lo que ponía es “ocho millas del cerco del perímetro”, para tratar de dar una noción de la escala del espacio.

Conocí a un tipo en ese pueblo que se llamaba Martin H que estaba desempleado y políticamente activo. Él se cuestionaba muchas de las ideas percibidas durante ese momento. De un lado estaba Margareth Thatcher y sus colegas, que básicamente pensaban que el mercado tenía que decidirlo todo, y que una planta que no estaba generando ingresos tenía que morir, y del otro se encontraban muchas personas que quedarían desocupadas y miembros de los sindicatos peleando por los derechos de los trabajadores de las fábricas que estaban cerrando, que eran principalmente de las ramas metalúrgica, minera y construcción naval. Martin H. se cuestionaba cómo la clase trabajadora se había acostumbrado a este tipo de empleo tan duro. En realidad, se cuestionaba toda la naturaleza del trabajo y el empleo. Ocasionalmente conseguía publicar sus ideas en revistas como ésta: “Marxismo Hoy”. Él y otros desocupados empezaron a registrar todo lo que sucedía en la comunidad, y haciendo muy buenos trabajos.

El pueblo era muy conocido porque fue la primera planta que se cerró bajo el mandato de Margareth Thatcher. El fotógrafo de guerra Don McCullin fue allí en 1974. Hay un ensayo, junto con estas fotos, donde dice que McCullin voló directo desde Vietnam, donde había estado sacando grandes fotografías de la guerra para el New York Times. Viniendo de Vietnam y la guerra, McCullin al llegar al condado de Durham dijo que ese era el lugar más aburrido y deprimente que había estado en su vida. Algo increíble pensando que venía nada menos de un Vietnam tapado por los conflictos bélicos.

Martin H. y otros fotógrafos desocupados del lugar armaron precariamente una oficina, me llamaron, y me dijeron que tenía que ir porque había una persona mayor que tenía unas fotos muy interesantes. Un hombre que se llamaba Tommy Harris entró a la oficina con dos cajas de cartón llenas de negativos y contactos, todas las fotos sacadas con una Rolleicord. Básicamente lo que dijo es que no sabía que iba a hacer con esas fotos, y a lo mejor esa pequeña sociedad de fotógrafos que se había armado le podía dar un buen uso. Revisaron la caja y encontraron imágenes muy valiosas e interesantes. Tommy trabajaba en la bomba de la planta y hacía un sistema de rotación de tres horarios diferentes. Era un trabajador, pero en su tiempo libre sacaba fotos para dos diarios locales. Hacía fotos como ésta, una bandera de un sindicato. Cuando vi la foto me parecía más interesante todo lo que había alrededor. Ves esto y pensás que Tommy Harris es un buen fotógrafo, pero después ves lo que pasa cuando sus trabajos salen publicados en los diarios, cuando la imagen pasa a tener algunas imperfecciones. Cuando hablé con Tommy sobre esto, me di cuenta que a él realmente no le importaba. Su actitud con respecto a la composición era muy relajada. Lo más importante para él era que el sujeto estuviera en el centro del cuadro. Sacaba dos fotos por si alguno de los sujetos salía con los ojos cerrados. Eran tiempos de mucha austeridad, la película era cara y a él le interesaba hacer plata. Si tenía dos trabajos que había hecho, volvía al laboratorio y tenía a lo mejor seis fotos que había sacado. Abría la cámara, sacaba la película, la cortaba, y volvía a cargarla con una película de 120. Esto me fascinaba también. Sacaba dos fotos de cada situación, yo saco montones. Aún más hoy en día.

Éste es otro ejemplo. Hablé con Tommy sobre esta foto y le pedí que me explicara la composición de la foto. Por ejemplo, todo el espacio que hay arriba. Es la mejor parte de la foto. El cigarrillo, los picos de botella, el hombre desnudo. Todo lo que está en los bordes de la imagen hace que sea una gran foto. Al igual que yo, Tommy pensaba que la fotografía era una experiencia social. Su otra filosofía era meter la mayor cantidad de gente en la foto, porque de esa manera podés vender más cantidad de copias al diario. En realidad era un fotógrafo comercial”.

Ésta es una de las pocas fotos que pudo sacar Tommy dentro de la planta. Lo interesante de esto es que Consett era un pueblo que vivía en torno a la producción de esta fábrica de acero, y ésta es una de las pocas imágenes del interior de la planta. La gran mayoría eran fotos sociales, del perímetro y de la gente alrededor de la planta. La biblioteca local había sido fundada por planta, al igual que la escuela y el mismo equipo de fútbol del pueblo pertenecía a ella. Tommy tenía muchas fotos de grupos, y muchas de ellas reflejaban la comunidad. Cuando miré las fotos que él estaba sacando, la mayoría mostraba personas aisladas. Más allá de encontrar fascinantes a las fotos de Tommy en sí mismas, empecé a evaluar la posibilidad de trabajar en relación con las imágenes de Tommy. También comencé a observar otros tipos de fotografías. Cuando caminaba recorriendo el perímetro de la planta, hablaba con gente y me decían que tenían fotos de cómo era antes el sitio de la planta, o en este caso cuando estaban demoliendo una de las torres. Comencé a juntar este tipo de fotos y armé un archivo. Miraba estas fotos vernáculas como nunca antes”.

Fotos como ésta, una preciosa imagen. Hay mucha información en ella. Si sos de Gran Bretaña reconocés el ambiente enseguida. Esas casas aluden a la clase trabajadora, la mujer mayor usando un delantal, el color de la foto a partir del paso del tiempo. Empecé a mirar estas fotos desde el punto de vista estético y por su contenido, y empecé a juntarlas. Todas cuentan historias del lugar y de su gente.

Éstas son algunas imágenes mías. Esto era un restaurant indio en el pueblo, y me gustaba la idea de entrar al baño era como ingresar al paraíso. Cuando hice una exposición, los textos los puse en los marcos de las obras, que eran de acero. Éste es un texto sobre el empleo, y es una letra de una banda inglesa de los 80. La letra dice “estaba contento en la nube de una hora borracha, pero el cielo sabe que lo estoy lamentando ahora. Estaba buscando un trabajo, después encontré un trabajo, y el cielo sabe que lo estoy lamentando ahora”. Éstas son el tipo de cosas a las que su amigo Martin pensaba, y la reflexión sobre el empleo a la que se refería.

En este caso dice arriba “parada de autobuses de Consett” y abajo dice “hecho con acero italiano”. Entonces el público no sabía si la parada o el marco estaban hechos con acero italiano.

Éste es el libro que me lanzó en mi carrera. Es cierto que un libro con solamente fotos mías no hubiera sido igual de especial. Un buen libro quizás, pero nada especial. Sin embargo este libro, que fue publicado en 1990, generó mucho debate. Porque es un libro sobre Consett, y que muestra la era post industrialización. Es también una reflexión sobre la fotografía, quién toma fotografías, por qué toman fotografías, lo que significan las fotografías, el cambio de contexto de las mismas. Por ende, genera una discusión sobre la fotografía en sí misma. También tiene que ver con la cronología, porque organicé las fotos en orden cronológico. La foto más antigua que aparece en el libro es del álbum familiar de una persona, entonces el libro abre con fotos familiares. Después hay un texto escrito por un trabajador de Consett en los años 20 que descubrí y volví a editar.

Participante: “¿El diseño gráfico tiene algún significado en particular?”

JG: Yo era amigo de muchos diseñadores gráficos que eran los Why Not Associates, una organización de reconocidos tipógrafos. Estaba muy interesado en hacer un libro contemporáneo para los años 90, y me gustaba la idea que alguien en 2010 agarre el libro y piense que los trabajos ya estaban bastante avanzados para los 90. El buen diseño no envejece, sólo te da la impresión de que está bien hecho. No quería que la gente sintiera que lo tenía que leer para entenderlo, pero me interesaba que se vea bello. Esa es la razón por la cual está desplegado de esta manera, y un poco con cierta referencia a lo que era el diseño ruso de los años 20 y 30. Los fotógrafos rusos hicieron algunos libros muy buenos sobre el heroísmo de los trabajadores de aquel país. Era joven, y en ese momento me interesaba hacer algo distinto, algo que no se haya hecho hasta ese momento. Además, era un libro que hablaba sobre el diseño. Cronológicamente entra en el libro Tommy Harris, quien trabajó entre 1949 y 1970 y fotografió todos esos grupos. Y después entró el reportaje de Don McCullin para la revista Sunday Times, para luego pasar a mi trabajo. Luego, un ensayo de Martin, quien armó ese grupo de fotógrafos amateurs sin empleo. Se vuelve nuevamente a las fotos familiares, siendo la última foto del libro de éste tipo. Personas como Julian Germain o Don McCullin vienen y van, pero la gente va a seguir sacando fotos para ellos mismos.

Participante: ¿Conoció a Don McCullin?

JG: Sólo para pedirle permiso para poder usar su trabajo.

La primera visita que hice a Consett fue en 1984, y empecé a trabajar seriamente allí en 1985. El libro fue publicado en 1990, en el décimo aniversario del cierre de la planta. Fue un duro trabajo a lo largo de muchos años, pero el tiempo es un elemento muy importante en mi trabajo. No siempre, pero mis trabajos más importantes me toman mucho tiempo. Muchas veces uso a el tiempo como tema”.

Sobre el libro: “For every minute you are angry you lose sixty seconds of happiness”, 2005

Conocí a Charles en 1992. Yo iba a una ciudad en el sur de Inglaterra que se llama Portsmouth para fotografiar un partido de fútbol, para un libro que estaba haciendo sobre fútbol. Llegué temprano, y en la calle donde estaba el estadio había una casa amarilla que era rara. La mayoría de las casas eran un tono más magnolia o blanco, pero ésta era amarilla. En la ventana había unas plantas que estaban en venta, y me dí cuenta que era un negocio. Entré y ahí estaba Charlie. Compré unas plantas para llevar a Londres, donde vivía en esa época. Como iba a la cancha, pregunté si podía pasarlas a buscar después y dejar algunas otras mías que no quería entrar al estadio. Volví después del partido, me invitó a tomar una taza de té, y en el cuarto de atrás había muchas fotos de su esposa. Yo me dí inmediatamente cuenta que seguramente ya había muerto. Me quedé muy conmovido por estas fotos, con la forma que estaban exhibidas en su vida. Me mostró algunos álbumes con muchas fotografías de su esposa. No una gran cantidad de fotos como nosotros diríamos, pero para este hombre era un enorme caudal de imágenes. No había ninguna otra cosa, simplemente fotos de ella. Luego me mostró la cámara, y me sacó una foto con ella. Me fui, y luego me mandó la foto de regalo. Fui a visitarlo durante 8 años de tanto en tanto. Las fotos de ella estaban por todos lados. Lo que me conmovía era que los dos eran jubilados y juntos realizaban paseos. La mayoría de las fotos son de estos paseos. Prácticamente no hay fotos del periodo anterior. No tenían fotos de cuando eran jóvenes, cuando jugaban con sus hijos, cuando trabajaban. Pero sí había de su jubilación juntos, fue para ellos como una segunda luna de miel. Cuando ella murió, Tommy ya no sacó más fotos porque la razón para sacar fotos ya no existía. Eso fue lo que más le sorprendió a Tommy, el gran archivo de fotos que tenía de su esposa. Le encantaban esas fotos de Petty, y sentía que podía hacer algo con ellas.

La otra pasión de Charlie eran las flores. Le sacó fotos durante muchos años sin saber por qué lo hacía, ni nada. No era un proyecto ni un encargo, no tenía que hacerlo. A veces iba a visitarlo y no le sacaba fotos, pero normalmente sacaba algunas, por ahí unas quince fotos. La fotografía era sólo una parte del encuentro que tenía con él. Nos escribíamos cartas e iba ocasionalmente a visitarlo. Había algunas cosas que me atraían mucho de Tommy, por ejemplo que la gente de mi generación no está acostumbrada a reparar cosas, simplemente si se les rompe algo lo tiran y compran una cosa nueva. Charlie era un hombre que había sobrevivido a la Segunda Guerra Mundial, pasó por tiempos de mucha austeridad, había que cuidar el dinero, y guardaba y le daba valor a cualquier cosa que tuviera por si lo podía volver a usar. Esta forma de pensar llegaba a puntos bizarros. Por ejemplo él tenía un negocio, y si Charlie tenía que salir dejaba una nota en la puerta. Por ejemplo decía “Me voy a tal lugar por el seguro, vuelvo en 20 minutos”; “me voy a la peluquería vuelvo en 30 minutos”, etc. Pero lo lindo es que no tiró estas notas. Las tenía guardadas así la próxima vez no las tenía que volver a escribir. Iba a la peluquería todos los meses, esa nota le duró por años, no quería desperdiciar la tinta (risas generalizadas)”.

Esta foto es en una excursión donde fuimos con Tommy. Tommy me preguntaba si quería escuchar algo de música y ponía un disco por ejemplo de Nat King Cole, nos sentábamos y escuchábamos uno o dos temas. No hablábamos, sólo escuchábamos. Para mi esto era una revelación porque era muy común tener música de fondo. Si realmente escuchábamos la música, con dos temas bastaba. Cuando dejábamos de escuchar música pasábamos a otra cosa, era como entrar en la forma de vivir de Charlie, algo que me hizo pensar. Estaba muy ocupado, tenía una vida muy agitada en esa época. Estaba haciendo un libro sobre el fútbol, mudándome de Londres hacia el norte de Inglaterra, haciendo publicidades, estaba enseñando, y cuando podía ir a visitarlo a Charlie era otro mundo. Me di cuenta cuando Charlie murió que eso seguramente ese era de lo que se trataba este trabajo. Era un trabajo de pasar el tiempo con alguien que valora las cosas simples, que vive fuera de la complejidad del mundo moderno.

Autor: José Gómez

Autor: José Gómez

Cuando hice una exposición, quería darle una gran importancia a los álbumes de Charlie. Esos álbumes son universales, todo el mundo los tienen. Son muy bellos y tienen mucho valor. Era su forma de decir algo sobre como este tipo de fotografía forma parte de la vida de todos nosotros. Hice una película con películas cortitas que se llamaban “Películas de 24 exposiciones”. La película es una mirada sacando detalles de 24 fotos. .

 

 

Esta es una de las excursiones que hicimos. Este es el libro que se llama “Por cada minuto que estás enojado, perdés 60 segundos de felicidad”. Es un título hermoso, algo que Charlie tenía escrito en algún lugar de su casa. Lo más interesante es que no quiere decir que no tenés que enojarte, sino que si te vas a enojar asegurate que sea por algo que valga la pena.

Sobre el trabajo: “The Face of the Century”

El tiempo. El tema del tiempo. Este es un retrato de una mujer que tiene 99 años. Hice una serie de retratos en 1999 en un momento especial de mi vida. En 1998 había nacido mi hija, que murió cuando tenía cuatro meses. En el 99 mi mujer estaba embarazada otra vez, y las circunstancias eran distintas. El bebé tenía que nacer a fin de año. Yo me había quedado con algo en la cabeza que había leído de Walter Benjamin, el filósofo. Alguien acá va a conocer mejor la cita que yo, pero era algo sobre sostener en la mano una foto del nieto de Napoleón, y cómo sostener esa foto parecía estar conectado a la figura histórica. Es esa cosa mágica de la fotografía, es como una sombra de luz o un reflejo de la persona real. De alguna manera, un vínculo directo. En ese caso, un vínculo directo a través de 100 años. Empecé a pensar que sería muy lindo realizar una serie de retratos de 101 personas, empezando por alguien que tenía cien años y que había nacido en 1899, para terminar con mi hijo que iba a nacer en noviembre de 1999. Tenía esta idea en la cabeza de que si ese niño viviera por cien años, tendría un vínculo en el tiempo con la persona que tenía cien años en el momento que el bebé naciera. Era extraño para mí porque era una idea, un concepto desde un principio. No me tomó mucho tiempo, seis meses. Pero el tiempo es fundamental en el trabajo porque empiezo con alguien que tiene cien años, pero a medida que recorres el libro te encontrás con alguien más joven. Más allá de las personas muy mayores y las más recientes, la mayoría de la gente fueron retratadas en la calle. La forma de trabajar era que si, por ejemplo, tenía que ir a Birmingham a ver un trabajo, y tenía un tiempo libre, salía a la calle, buscaba un fondo liso, y esperaba a que pase gente. Le preguntaba cuantos años tenía, y si estaba dentro del rango que necesitaba, le sacaba tres o cuatro fotos. Se puso complicado al final porque tenía que buscar dos o tres personas con una edad precisa. Es un libro sobre la vida, sobre la muerte, y sobre todo lo que hay entre uno y el otro. Porque la gente muere en todo momento en esta línea continua.

Sobre el trabajo: “Generations”

Esta serie es parecida en los términos que estaba buscando. La serie de la cara del siglo se unía con este nuevo proyecto, que tiene que ver con la idea de lo increíble que es ser un individuo en medio de la cantidad de gente que constituye la humanidad. La cara del siglo me hizo pensar mucho de dónde yo venía. Empecé a hacer fotos de series de familias donde había por lo menos cuatro generaciones distintas que seguían vivas. Me interesaba la idea de reunir a estas cuatro generaciones, y literalmente ponerlos en una fila cronológica para ver si te podés dar cuenta de dónde viene la gente. Para mi sí se puede. Uno es el padre del otro, de derecha a izquierda. Y obviamente mi padre está muerto, pero de ahí sigue la línea. Y quería hacer una serie que sugería ese correr del tiempo.

Sobre el trabajo: “No olho na rua”

 

Trabajo en muchos proyectos. Uno de los proyectos más importantes que he trabajado en los últimos quince años es uno que se llama “El horizonte hermoso”, y el subtexto es “Los ojos de la calle”. Este proyecto surgió porque fui a visitar Brasil en 1994, y mi trabajo Steel Works fue expuesto en el museo de arte moderno de San Pablo. Dí una conferencia y vi algunos porfolios. Conocí a una fotógrafa artística que se llama Patrizia Acevedo, y yo en ese momento estaba trabajando con el tema del fútbol. Estaba en Brasil, era como un lugar obvio para conseguir buenas imágenes de ese deporte. Sin embargo, me di cuenta que para fotografiar fútbol en Brasil me tenía que meter en las favelas, ya que el fútbol está sobre la superficie ahí. Cuando visité la favela fui a una que se llama Mangueira. La gente me decía que era peligroso para mí que me metiera en la favela. En ese punto de mi trabajo, también estaba haciendo otros proyectos en los que estaba archivando fotos ajenas, entonces acá se me dio por realizar un proyecto donde yo empezaba a generar fotografía. Literalmente le propuse a la gente que sacara fotos para mí. Todos dijeron que si. Patricia, Murilo Godoy, y yo empezamos un proyecto en una favela de Belo Horizonte. Enseguida fue un trabajo bellísimo, y empezamos a utilizar las cámaras que los chicos usaban en las favelas. Guardé mi Pentax 67, y empecé a sacar fotos con una cámara de cinco dólares. En 1995 empezamos a trabajar con tres grupos distintos de chicos de la calle. El proceso era muy simple: íbamos a un grupo, llevábamos cámaras para todos los chicos, las repartíamos, y se las dejábamos. Veinticuatro horas después volvíamos, cambiábamos las películas, y otra vez los chicos podían salir a fotografiar. Hacían dos copias de las fotos: una para ellos mismos, y otra para nosotros.

Esa es una de las primeras fotos que nos llegó, y es una de las más importantes de mi vida. Está hecha probablemente hecha por un chico llamado Otto Sillo, porque es muy difícil saber quien ha sacado la foto. Pero Otto Sillo era su novio (de la chica de la foto), que está embarazada. A mi me encanta esta foto por la seriedad con la que toman la fotografía. Lo increíble es que no tiene nada que ver con un chico de la calle. Es una foto sobre estar embarazada, y lo increíble que eso es. Hay una reproducción de un Goya en la pared. Créanme que esto es sólo una casa con unas chapas y unas maderas debajo de una autopista.

Este proyecto lleva ya quince años, y ya hemos podido tener conversaciones más profundas con la gente. Muchas de las personas que participan han muerto, pero las personas que siguen participando están haciendo reflexiones importantes sobre el significado de lo que están haciendo. Lo que es interesante es que las personas que no tendrían un registro fotográfico de ellos mismos, como podría tener Charlie o cualquiera de nosotros, ahora lo tiene. Tienen ahora por lo menos un registro fotográfico de los últimos quince años.

En 1997 hicimos una exposición de afiches en la calle. Miles de personas la vieron. No había ningún tipo de explicación en los afiches. Esa es Jaidi en 1995, y esa es ella en 2005. Esta es Patricia en 1997, y esa es ella en 2005. Hay algunos chicos que aparecen y desaparecen. El chico del medio que se llama Marcos apareció e insistió tanto para que le dieran una cámara, que finalmente lo terminó consiguiendo. Él hizo una serie fantástica de fotos de él mismo con gente rica. En los años 90 la droga que más utilizaban era el thinner, ahora más bien lo que se consume es el paco. Éste es el diario que fue publicado en 2007. Publicaron 12 mil copias y fue distribuido en forma gratuita. Cuatro mil copias fueron a una revista fotográfica de Inglaterra y lo incluyeron como suplemento. Eso pagó el hecho de hacer doce mil copias. Las otras ocho mil fueron distribuidas por la calle.

En esta última semana hemos estado trabajando junto a Patrizia y Murilo en la maqueta para un libro que vamos a hacer con este trabajo. Una de las cosas que queremos mostrar es este tema del tiempo. Tenemos fotos de cuando esta chica tenía quince años, y fotos sacadas el año pasado. En los últimos tres meses revisamos todo. Encontramos cosas increíbles.

En 1998 vendimos algunas de éstas imágenes a diversas revistas, y con el dinero conseguido hicimos un libro. Y con la plata del libro pudimos hacer un centro comunitario en la favela con biblioteca incluida. Cuando sos fotógrafo uno es conciente de todo lo que tiene que ver con temas relacionados con la explotación y la relación que uno tiene con el tema o el sujeto al cual uno le saca fotos. Esto sin dudas mezclaba todos esos temas de debate. El tema del autor en éste tipo de proyecto, porque raramente sabemos quién sacó la foto, lo que sí sabemos quién tiene la cámara. Es bastante interesante porque a nosotros no nos importa quién sacó la foto, lo importante es quién aparece en ella. La propiedad o la autoría de la foto pertenece más al que aparece en la foto que a quién la sacó. Entonces cuando repartimos las fotos, las que aparece Jaidi se las damos a ella, etc. Había problemas cuando en la foto aparecían dos o tres personas. No pretendemos que la moral de estos proyectos sea elevada porque yo siento como si fuera el autor del proyecto y ellos me dan muchísimo. He recaudado un enorme archivo de material, por el que me siento responsable y me tomo ello con mucha seriedad. Por otro lado, no soy un santo. La realidad es que si hubieran hecho fotos pésimas en 1995, no hubiera vuelto en 1996. Lo que me hace volver son las fotos que ellos sacan.

Lo bello de este trabajo es que es muy directo. Tienen cero pretensiones, todo lo contrario a las que tendría un fotógrafo profesional cualquiera. Todos saben de la historia de la fotografía, de la composición dorada. Es tan simple la fotografía que vos pensás lo que querés, lo tomás y tenés la fotografía. Éste nuevo tipo de cámara está destruyendo ese instante o esa forma de concebir la fotografía. Todas las fotos que muestro están hechas para la memoria, para que la gente recuerde momentos. De alguna manera éstos chicos hacen lo mismo, aunque a veces lo hacen por curiosidad o simplemente por jugar. Sin embargo, hay veces que se lo toman muy enserio. No tiene nada que ver con la educación. Nunca les enseñamos cómo sacar buenas fotos, simplemente les dicemos que no pongan el dedo delante del lente. No prentedemos que esto sea considerado como un proyecto educativo, ni que va a mejorar sus vidas. Aunque sí sabemos que les da placer. El acuerdo que tenemos con ellos es que si entra dinero por el libro, la plata va a ir a la asistencia práctica o para el placer de la gente que vive en la calle en Belo Horizonte.

Participante: “Cuando habla de las cámaras que están destruyendo ese momento, ¿habla del delay?”
Si, es muy frustrante. Se rompe el espíritu de la fotografía. La cámara no miente, simplemente hace su trabajo. Es una función mecánica, y al sacar una foto registrás un instante preciso. Esa forma de reflejar ese instante verdadero y eso que está sucediendo delante del lente y poder capturarlo, es lo que hace que la fotografía sea muy seductora. Podés mirar en gran detalle una fotografía, de una manera que no podés mirar con el mismo detalle una película. Son muy cuidadosos con las cámaras, y si una de ellas desaparece hacen un esfuerzo para intentar averiguar qué le pasó, o a dónde fue a parar. A ellos les importa que nosotros nos demos cuenta que están interesados en ayudar. El tema que importa no es tanto la cámara, sino las fotos que hay dentro de la misma. Pero si tuvieran equipos caros, sería una relación muy distinta. Va a llegar un punto en algunos años que no podremos conseguir cámaras baratas que le podamos meter películas, y un proyecto como éste va a ser más complicado. Con cámaras digitales podrían borrar las fotos, y eso sería peligroso. De algún modo, ellos tienen la posibilidad de eliminar fotos al publicarlas.
En la maqueta que estamos elaborando vamos a incluir algunas series de fotos que salieron en los afiches, las fotos del diario que salieron ahí y de ellos repartiéndolos. El libro va a ser un recorrido por el proyecto, no sólo una serie de imágenes. Dentro del libro va a haber “libros más pequeños”. Éstos son inserts. El libro en sí va a ser grande, pero dentro de la caja va a haber fotos sacadas del laboratorio (10×15). En los “pequeños libros” salen los temas recurrentes o el trabajo de algunos de los fotógrafos específicos que hicieron determinados trabajos, por ejemplo el trabajo de Marcos con gente rica. Entonces va a haber un “pequeño libro” de los chicos con autos, haciendo de cuenta que se los están robando, sentados arriba de ellos. Hay un “pequeño libro” muy bello de hombres y bebés, y otro simplemente de bebés solos. Hay otro de una niña llamada Rosemary, que fotografiaba gente dentro de los autos. Esperaba en los semáforos, y sacaba fotos a la gente esperando en el semáforo. Es una serie increíble. Una cosa muy graciosa que me contó el resto de los participantes es que si ella veía a la misma gente en el semáforo, ella le mostraba la foto a esa persona y la vendía por un real”.
Espero que sea un libro grande, de muchas páginas. Grande en escala y que tenga mucha textura. Con hojas grandes y pequeñas dentro del libro, porque tiene que ser un libro espectacular y algo fuera de lo común. Que capte la atención rápidamente. En la tapa va a estar la foto de Jaidi, una copia de 10 x 15. Y en la contratapa va a estar la foto de Jaidi con la vela mirando al bebé. En ambas tapas se tiene que notar que ha habido un trabajo durante un período de tiempo.

 P: “¿Hubo algún sponsor para realizar la publicación del diario?”

El diario fue financiado con el dinero de las revistas que se vendieron al extranjero.

 

P: “¿Quién financia esos proyectos y las publicaciones?”

 

Va a ser una editorial la encargada de financiar la publicación del libro. El libro “El Mundo Maravilloso del Fútbol” fue financiado a través de la venta que hicimos de ciertas imágenes a Europa. El libro de los chicos de la calle va a ser publicado por una importante editorial. Con respecto al financiamiento en general, en realidad no hay. Va a ser publicado por Prestel, de Alemania. Es una editorial internacional que tiene sus oficinas en Nueva York y Londres, y sistemas de distribución en Latinoamérica”.

P: “En Brasil hay una ley de apoyo cultural, podría ser de ayuda para su publicación”.

Hay un punto con respecto a la independencia del proyecto. Cuando hicimos los afiches de la calle, tuvimos la posibilidad de recibir el apoyo de UNICEF. Pero no quería que hubiera un logo de UNICEF en las imágenes. Una de las cosas que me parecía especial de los afiches era que no había ninguna explicación de dónde venían las fotos ni quién las había hecho. En cuanto ves un afiche de UNICEF, sentís como que alguien está haciendo algo. Hubiera sido mucho más fácil tener un logo del gobierno, porque a la policía no le gustó nada nuestro proyecto. Eso fue conseguido con financiamiento privado. Vendimos afiches a gente que estaba interesada en el proyecto y en el arte. Había doscientas copias de cada imagen de un metro y medio por un metro, y tenían que pagar 1250 dólares. No era una fortuna en términos de compra de una obra de arte, por lo que 199 copias iban a la pared y nosotros nos quedábamos una.

P: “¿Quién era el encargado de elegir las paredes?”

Contratamos dos especialistas y ellos hicieron su recorrido habitual, pero también hicimos los nuestros. Los participantes también hicieron los suyos, pero era complicado hacerlo por la policía. La policía se metía mucho con ellos. La policía nos paraba, se comunicaban por la radio. No queríamos exponer a los chicos a esa situación. Con el diario fue distinto porque lo pudimos distribuir sin problemas.

Estuve con la gente que participó en el proyecto de Brasil, y cuando iban a sacar fotos la gente les gritaba las peores cosas, como si fueran animales. Es una de las razones por la cual decidí hacer los afiches. Tenían dos formas de reaccionar: una es con piedad, y la otra con miedo. Ninguna de las dos es muy útil. La exposición en la calle le podía dar otra perspectiva a la gente para que pueda reflexionar sobre ello. Por ejemplo, podían ver en las fotos que los chicos no estaban angustiados, que podían sacar buenas fotos, y otra dimensión del trabajo de esta gente que quizás no pensaba que podían ofrecer. Simplemente intentamos cambiar la perspectiva de aquellos que criticaban

Hoy en día es muy común que en proyectos sociales utilicen la fotografía. El primer proyecto que yo sé de esta línea es de una fotógrafa americana que se llama Wendy Ewald. Ella hizo un libro que se llama “Retratos y Sueños” que creo que se publicó en 1983. También hizo un proyecto en los Apalaches, trabajando con chicos de una escuela. Es un proyecto sobre la comunidad a través de la mirada de los chicos. Es el único proyecto de esta naturaleza que sabía que existía, y en los últimos diez o quince años la fotografía ha pasado a ser una herramienta fundamental para los proyectos sociales. En México también hay un proyecto similar. Este tipo de trabajos han pasado a ser parte del vocabulario de la fotografía. Son todas distintas formas de mirar el mundo. Después hay personas que hacen fotos para la prensa. Hay una nueva frase que ha entrado en la discusión fotográfica que se llama “periodismo lento”. La idea es que es imposible conocer algo si uno va una única vez y se va. Necesitás quedarte, permanecer ahí, para darte cuenta cuál es el contexto. De todas formas, las revistas y los diarios cada vez tienen menos dinero para invertir en el “periodismo lento”.

¿Conocen al fotógrafo inglés Joel Sternfeld? Él es muy interesante porque hizo un proyecto llamado “Prospectos americanos”. Trabajaba en un diario, y un día antes del lanzamiento de una nave espacial de la NASA, hacía su trabajo, y luego se tomaba media hora, agarraba su cámara de 8 x 10. El fotoperiodista tiende a acercarse al evento, pero Joel buscaba alejarse un poco. En general o se acercan mucho, o son vagos y ponen el teleobjetivo y sacan las fotos desde lejos. Éste es un ejemplo clásico del tipo de trabajos que hacía. Lo llamaron para fotografiar un fuego, pero hizo una foto de un paisaje de un bombero comprando un zapallo (risas generalizadas). Esa es la foto para el diario, en ese encuadre, pero a él le parece más interesante si te alejás un poco y tomás una perspectiva más amplia. Lo hizo por muchos años y realizó una bellísima colección.

Esa por ejemplo está muy lejos, pero es de un elefante que se había escapado, y claramente lo llamaron para fotografiarlo para el diario. Pero tomó distancia y sacó una foto con una cámara de gran formato a lo lejos, de paisaje. Esto es un buen ejemplo de cómo aprovechar el trabajo y tomarse el tiempo para hacer la foto. No son muchas las posibilidades que se presentan de fotografiar a un elefante caído.

Éste es una artista llamado Jeremy Deller. No es en realidad un fotógrafo, pero ha hecho algo muy bello porque trabaja con la necesidad de expresarse de forma creativa de la gente. En éste caso hay una banda de rock llamada “Los Predicadores Maníacos de la calle”. Tiene un público enorme de adolescentes levemente deprimidos. Tienen revistas, páginas webs, etc. Él hizo una convocatoria a través de estas páginas, y dijo que si alguno de los fans tenía algún dibujo en torno a la banda, que él estaba haciendo una obra y le gustaría incluirlos. La exposición incluía algunos poemas y dibujos, no necesariamente muy buenos, pero lo importante no era la calidad sino la necesidad que ellos tenían de expresarse. Sería muy fácil burlarse de alguna de esas cosas y reírse un poco, realmente. Lo lindo de este proyecto es que él festeja esta necesidad creativa”.

Éste es otro proyecto de Jeremy Deller, cuando él estaba arrancando como fotógrafo en 1984. Hubo una gran manifestación de los mineros, debido a la decisión política de Margareth Thatcher de cerrar todas las viejas industrias. Ella movilizó a la policía, y fue muy criticada por ello. Hubo un evento especial en Yorkshire, al norte de Inglaterra, y hubo una batalla allí. Pasó a ser un hecho muy conocido desde aquel entonces. Lo que yo haría para encarar el tema de aquella batalla, conocida como la Batalla de Old Greaf, sería ir a buscar material en los archivos, recorrería el lugar, le pediría fotos a aquellos que vivieron aquel episodio, le sacaría fotos retrato a las personas que vivieron aquel momento, etc. Ese es mi método, pero Jeremy Deller usó un enfoque que tiene más que ver con la historia antigua. Por ejemplo, tenemos sociedades en Inglaterra que vuelven a recrear eventos históricos, especialmente de la época de los romanos y de la Revolución de 1700. Esa es gente que básicamente le gusta vestirse como soldados. Literalmente logran juntar cientos o miles de personas, y de repente hay un soldado romano con una lanza y otro romano montado a un caballo. Recrean de la forma más precisa posible a una batalla. Deller convenció a muchas de estas asociaciones para recrear la Batalla de Old Greaf, y además muchos de los mineros que participaron del evento estaban incluidos y tenían un papel muy importante al recrear la coreografía del evento. Muchos de los oficiales de policía que ahora estaban jubilados también fueron parte del evento. Literalmente reconstruyeron el evento desde las 7 de la mañana hasta las 4 de la tarde, realmente es una película. Es una forma fascinante de pensar sobre el pasado, trabajar con la memoria de la gente, y permitirles volver a experimentar algo que sucedió en aquel momento.

- El taller se realizó el sábado 9 de abril por la mañana en el marco del 1er Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapdmalal.

Desgrabación: Fabian Induti

 

 

FRAGMENTOS DESGRABADOS DEL TALLER

Carlos Bosch: La intención mía es que ustedes entiendan que si cada uno de ustedes en el futuro no se conoce, no sabe lo que quiere, y no sabe cómo hacer lo que uno quiere tiene un futuro jorobado. Hoy en día millones de cámaras sacan millones de fotos para alimentar millones de medios que no son nuestro terreno. No estamos en el mismo terreno. Yo estoy convencido, que de aquí en adelante vamos a comenzar a hablar de la fotografía coloquial. Cuando hablábamos en Argra sobre derechos de autor, me preguntaba, cómo hacer que alguien cobre derecho de autor de una foto hecha con el teléfono. Alguien la subió a flickr y Getty la compra porque le interesó. Y la persona contentísima porque la foto sale en el New York Times. ¿Vas a cobrar derecho de autor? Eso es como cobrar derecho de autor por lo que les estoy diciendo. La fotografía empieza a hablar, a ser un lenguaje coloquial. Eso no es fotografía, eso es hablar en imágenes, es otro mundo. Nosotros tenemos que hacer nuestras imágenes, podes hacerlas con un teléfono o una estenopeica, pero tiene que ser la búsqueda de lo individual…

Todo este speech es porque tienen que entender que si uno de aquí en adelante no está preparado realmente para lo que viene, que es un mundo mucho más abierto, nos va a exigir a nosotros ser cada uno, uno mismo. En la medida que uno no sea uno mismo y se coloque en un lugar donde no sea uno mismo, va a ser un pelotón de gente que no va a ver nada, van a ser utilizados para la fotografía barata. Ahora si cada uno es quien es, va a tener la posibilidad de su propio camino. Internet es un mundo entero que se abrió para nosotros. Nunca hubo más fotografías, ni tantos medios para publicar. Lo mejor que nos puede pasar es cada uno hacer la carrera personal. No digo que no haya que ganarse la vida, pero también hay que hacerlo, sino no hay nada. Y no es que sea pesimista.

Es importante que el fotógrafo se respete a sí mismo antes que nada, en el sentido del valor del trabajo que está haciendo. Hay que estudiar bien donde se puede ubicar ese trabajo. Yo conozco a pocos fotógrafos que hacen marketing. Hay que ir buscando la forma de trabajar para poder vivir de lo que hacemos bien y nos gusta. Y para eso hay que hacer el marketing, hay que fijarse la parte técnica del diseño, y sobretodo hay que saber con quién comunicarse. No hay que ir siempre al jefe de fotografía que generalmente es el más buscado, sino que más bien hay que ir al diseñador de fotografía que es el que le pide al jefe dame esto, dame lo otro, necesito tal cosa.

Tenemos también que tener una buena administración, lo que implica saber los costos que tenemos, los gastos básicos de funcionamiento, y la capacidad que vamos a tener para ganar ese dinero. También hay que saber que tenemos que aguantar un tiempo sin ganar y gastar dinero que no tenemos. Lo que no hay que hacer es confiar en que si uno se mete en una estructura fotográfica que te oprime, te va a matar la creatividad y las posibilidades de trabajar. Porque el verlo te permite de alguna manera liberarte.

La única manera de enriquecerse con la fotografía es fotografiar a un mafioso, hacerse amigo de él, al final asociarse, y terminar siendo el mafioso número uno. Como fotógrafo no hay ninguna posibilidad de hacerse millonario. Podés vivir feliz y bien. En fin, hay que encontrar las maneras adecuadas de administración, ya sea en la casa propia o en una empresa. No se puede ser fotógrafo por el sólo hecho de ser fotógrafo. No basta con hacer fotos, también hay que saber venderlas. Hay que manejar un espacio. Si además de querer venderlas, queremos manejar un espacio de difusión artística, debemos saber donde están las galerías, quienes son los distribuidores, donde están los contactos, mantener y mimar al contacto. Si no existe eso, no vamos a llegar a ser fotógrafos y nos quedaremos en el intento. Si no nos administramos, vamos a ser gente que saca fotos, y se queja. Queremos que nos traten bien, tratémonos bien. Queremos que nos respeten, respetemos y hagámonos respetar. Y eso no quiere decir pelearse, sino que quiere decir que vamos a elegir a quien tengamos que elegir para comunicarnos, no al primero que llega. No hay que hacer lo que hace todo el mundo. Siempre hay que dirigirse al director de arte, que siempre es quien elige la foto”.

Foto: Damian Dopacio

Foto: Damian Dopacio

Forma de presentación del material

Hay muchas formas de presentar un material, pero es fundamental buscar la forma de distinguirse. A mi personalmente me gusta que el cliente toque las fotos, y generalmente presento los trabajos con carpetas divididas por temas. Esto implica que entablas otro tipo de relación con el cliente, con mucha más confianza. Yo prefiero eso a tener que hacer una proyección.

Otra buena forma de presentar el material es con un pequeño texto descriptivo al lado de la fotografía, y con un cierto diseño preestablecido de antemano. Esto habla bien de la intención del fotógrafo.

Para hacer un porfolio, a mi parecer la mejor foto tiene que ir primera de todas. La segunda, a lo último de todo, y en el medio no hay que contar la historia, no tiene que haber correlación. Al revés de cómo dice todo el mundo, mi experiencia es que hay que marear al que está observando. Porque si uno marea al que está mirando, el que está mirando marea a los demás presentes, y de alguna manera busca orientarse. Si vos le das una historia correlativa a un editor, cierra enseguida porque se aburre. En cambio si se pone todo mezclado, al tipo le queda la incertidumbre del resto del trabajo y mira todas las fotografías. Además no hay que repetir, hay que evitar muchas fotos con la misma óptica. Si el editor llega a la última foto y es buena, se va a acordar de uno. De lo contrario, se va a olvidar rápidamente. Otros consejos son evitar siempre lo marginal, si hay dos o tres situaciones parecidas dejar una sola, utilizar varios ángulos y varias lentes para mostrar distintos focos. Y por último, si se tiene una persona realmente de confianza y que te conozca, hay que mostrarle el book primero. No hay que ir a un fotógrafo amigo ni nada de eso, sino que hay que recurrir a alguien que sepa cómo estamos y qué sentimos. De esa manera, podemos llegar a lograr un porfolio mejor del que pensábamos, porque esa persona te puede sugerir algo que vos ni siquiera viste.

Esto obviamente cuesta dinero, pero son inversiones que tenemos que hacer en nuestra PYME. No hace falta hacerlo a un nivel de excelencia, y depende mucho el trabajo que se debe exhibir. Y para disminuir los gastos hay que conseguir canjes, lo cual ayuda mucho a nuestra empresita. Funciona como una empresa que tiene que tener contactos como si fuera realmente una gran multinacional.

Páginas webs

Se puede tener un página web o un blog, pero no se puede no tener alguna de estas dos opciones. Como fotógrafo, es sumamente necesario para mostrar los trabajos. Hoy, existir como fotógrafo, es existir en la web. Si queremos que nuestras fotos se vean como una exposición estática, no queremos andar tocando las cosas muy seguido, se puede tener una página web. Ahora si se quiere algo dinámico, y cambiar algo del reportaje que se hizo, y modificar a piaccere los trabajos, hay que tener blog. Hoy el blog tiene casi las mismas posibilidades que una página web a nivel estético porque se puede meter el Flash, salidas, entradas, apariciones, desapariciones, etc. En el blog hay mucha gente que te puede seguir, lo que significa que ve una vez tus trabajos, se anota y ya uno le puede mandar un mail con las novedades del blog. Es una conexión que se establece entre el que está observando y quien realiza el blog. Además podés tener simpatizantes, y si se superan los mil te da la posibilidad de poner anunciantes. Yo tengo un amigo español que comenzó con un blog, y ahora gana 15 mil euros anuales con sponsors del blog. El blog es algo que no puede faltar en la computadora de ningún fotógrafo. Me encantaría que en ARGRA haya un fotobloggers ARGRA, y que centralice a todos los fotógrafos de ARGRA que posean blogs. Eso sería un paso adelante porque nos estaríamos viendo constantemente, y estaríamos aportando información que sería muy importante porque más de un fotógrafo necesita mostrar sus trabajos. Somos fotógrafos para que se vean nuestras fotos, y a lo mejor en un diario te recortan la foto y no se puede apreciar su calidad real.

Hay que tener cuidado con Facebook porque es una ventana abierta a los desastres. Te pueden sacar información, te roban las fotos, se enteran de lo que hacés porque sí. La página web tiene que ser sobria, no tiene que ser un sitio donde vos hacés click en un lugar y tarda dos minutos en aparecer. Tiene que ser algo que se vea rápido.

Luego viene el tema de las tarjetas. En Japón, por ejemplo, la atención es darse tarjetas. Sino lo hacés, se cabrean. Dos personas que recién se conocen se pasan sus tarjetas, y todos felices. Es una costumbre de allá. Es bueno tener tarjetas personales, pero cuidado con cómo las hacemos. Es preferible hacer una tarjeta blanca con nombre, apellido y el mail, antes que hacerla muy cargada y que no se entienda.

Yo hablo de prepararse, buscarse a uno mismo. Cualquiera de ustedes que está en planta en un diario grande, sabe que no se va a jubilar en ese diario. Entonces, ¿para qué esperar? Hay que seguir adelante y en la búsqueda del camino de cada uno.

Participante: A veces hacés tu página con lo que a vos te gusta, pero no ponés los trabajos que hiciste de deportes, actualidad, etc. Entonces capaz un editor dice “ah, entonces no hace fútbol, yo necesito a alguien que vaya a un club”, y te quedás sin trabajo.

C.B.: Yo tengo en mi blog fotos de naturaleza, sociales, de viajes, y además tengo películas también. Toda la diversidad de trabajos que uno puede realizar, tiene que tener un punto en común que evidencie tu estilo de trabajar.

Participante: A veces porque demostrás que hacés una diversidad de cosas, no te tienen en cuenta en algunos entornos.

C.B.: Una posibilidad es hacer una web con una parte de los trabajos, y un blog con la parte más bien personal. Y el que lo mira dice “uh, que bien labura esto, y además también hace bien esto otro”. Es cautivante para el que lo mira. Si vos querés promover tu negocio, te hacés una página web, donde explicás tu carrera profesional, tu equipo, lo que hacés, lo que no hacés, etc. Pero como vos querés tener una relación inmediata y cotidiana con la gente, que te va a decir que buena esta foto, etc., ahí los clientes no existen. Así perdés tiempo y guita, porque las empresas buscan en las páginas webs, no en los blogs. Los blogs sirven para buscar y compartir información, en cambio las páginas webs son para trabajar.

Los blogs

Vamos a ver el blog de Lens, del New York Times. Esto es un diario, normalmente se publicaba una foto por portada. Esta portada tiene once fotos, una muestra de lo que fue evolucionando con el correr de los años. Ni en una revista se publican tantas fotos en una tapa, y únicamente me refiero al tema central de la tapa. El periodismo visual es lo que viene, y tendremos que adaptarnos todos.

Los medios se van a tener que adaptar, y cuando se quieran adaptar, nosotros tenemos que haber dado un paso adelante para empezar a tratar la relación con los medios de otra manera, y ahí el que este parado en su lugar, en el propio, es el que va a salir adelante. Ahora si nos quedamos esperando lo que va a pasar, los otros van a trabajar, no nosotros.

En el diario El País de España hay un fotógrafo que se llama Antonio Espejo, y el mismo periódico le ha dado a él un blog. Y el habla de fotografía española en ese blog. Eso aquí todavía no puede pasar, pero va a suceder. Cosas increíbles dentro de un blog de un diario. Que alguien pueda desarrollar fotografía de autor en un diario. Merle tiene un blog, es el único que hay en argentina.”

La agencia Siete, tiene una revista, el logo es como los fotógrafos de Siete ven el mundo. Como ven, fotografía de moda, y de política. Los límites se han roto. El Europaphotobloggers es un lugar donde se juntan cantidad de fotógrafos aficionados, y algunos profesionales, y donde hay muchos trabajos de cada uno de ellos. Esto por ejemplo, lo podriamos hacer aquí, en Argra.

Los americanos en la época de los hippies decían “una cosa trae a la otra”. Es decir, no hay que dejar de hacer, porque si uno deja de hacer, se aísla y no tiene contacto con las cosas del medio. Si uno intenta hacer un trabajo, lo hace sin pensar que se va a ganar algo de dinero, ese trabajo va a ir a algún lado, alguien lo va a ver, y se va a producir algo con ese trabajo. De no hacerlo, no se va a producir nunca nada. Yo hace un tiempo empecé a hacer un trabajo de arquitectura bajo los puentes. Bajo los puentes la gente se hace casas diferentes, porque tienen techo y tienen suelo. Se hacen casas diferentes. En la autopista 25 de mayo, cada casita tiene un toque particular que realmente es arquitectura popular. Ese material yo lo estoy haciendo, y no se que va a pasar. Yo hice los piqueteros y nunca lo vendí en ningún lado. Hay materiales que además, los fotógrafos que tenemos cierta conciencia y militancia, hay un material que tenemos que dejar históricamente. Somos testigos de una época y no podemos privar a esa época de algunos testimonios que tienen que haber. El que tenga esa conciencia, tiene que hacerlo. El trabajo de los piqueteros me pareció un material intimo, y resulta que se publicó en una revista literaria de Paris con poesías de Juan Gelman. Y fue lo mejor que me podía pasar. A mi me dio mucho más que guita eso. Una cosa trae la otra. No nos privemos de hacer. Javier Bauluz, es un tipo que piensa como yo, que hay que abrir oportunidades.

La semana pasada en Barcelona se creo un grupo que se llama “obtura”, el grupo se plantea en la web colocar proyectos que tienen los socios, o los que tengan buenos proyectos, a que sean subvencionados por la gente. Se plantean crear un cuerpo para conseguir que la gente ayude al fotógrafo a desarrollar un proyecto personal. Cada persona que siente que puede ayudar puede aportar 5 euros y 10 euros. La gente tiene conciencia que es necesario ese tipo de fotografía, si lo explicas bien.

Hay otras ideas para poner en práctica que son las cooperativas, bien planteadas, tienen un espacio. Hay lugar para un montón de cooperativas, el problema es ver a donde van a parar esas cooperativas. En Argentina no se si hay fotógrafos que se acercan a una ONG, por ejemplo. Pero ellas te permiten a veces llegar a lugares donde no llegarías nunca. Quiza no te paguen nada, pero vas a estar en el lugar, y podes producir material que se pueda vender. Es importante ver las salidas posibles…hay ong´s, hay cooperativas, hay organismos del estado que pueden permitirte llegar.

Sugerencias de links:

N.Y.T.LENS: http://lens.blogs.nytimes.com/

Chicago Tribune: http://www.chicagotribune.com/news/photo/

VII magazine: http://magazine.viiphoto.com/

Europa Photobloggers: http://europephotobloggers.org/

Barcelona Photobloggers: http://barcelonaphotobloggers.org/

El Pais: http://www.elpais.com/fotografia/

Gervasio Sanchez: http://blogs.heraldo.es/gervasiosanchez/

Obtura: http://www.obtura.org/

Periodismo humano: http://periodismohumano.com/

Daniel Merle: http://blogs.lanacion.com.ar/merle/

Creacion de blogs:

http:wordpress.org

http://www.livebooks.com/

http://es.wix.com/

www.blogger.com/home?hl=es

Carlos BOSCH: carlosabosch@gmail.com

Blog: http://carlosbosch.blogspot.com

* Fragmentos del desgrabado del taller dictado por Carlos Bosch el sábado 9 de abril por la tarde en el marco del 1er Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapdmalal

FRAGMENTOS DESGRABADOS DEL TALLER

Autora: María Candelaria Lagos

Autora: María Candelaria Lagos

Trabajo como fotoperiodista hace varios años en distintos medios, mayormente en la agencia Noticias Argentinas. Desde que comencé a ser fotoperiodista, paralelamente también me tomo mi tiempo para hacer mis trabajos personales. Y desde hace seis años estoy editando la revista Dulce Equis Negra, que es una mezcla de un espacio de reflexión, donde tiene lugar la poesía, la literatura, la construcción fotográfica. Cuando me propusieron compartir este rato con ustedes, sentía que era un espacio reducido para plantear las cosas importantes que vamos a plantearnos. Inclusive más allá de nuestra actividad de reporteros gráficos, creo que es un tiempo de plantearse cosas como personas más allá de la actividad que llevamos adelante. Tenemos un documental para ver sobre Tarkovski, director de cine ruso, donde él filma El Sacrificio y hace algunas reflexiones sobre el tiempo, básicamente sobre lo que es el cine. Sin embargo, también me parece que toca muchos puntos que refieren a nuestro oficio. Inclusive hace unas reflexiones que tienen que ver con el hombre, con la vida. Mi idea es que nos sirva para llevarlo y luego hacer una reflexión, y haber constatado una posibilidad de ver las cosas. 

 

Después tenemos para ver una cantidad de fotografías que están relacionadas con nuestra actividad, con estar en la calle, con el oficio de estar fotografiando lo que sucede. La mayoría de los casos tienen algún desarrollo, aunque hay también algunas sueltas, de Sanders, Dorothea Lange, Cappa, Bresson… Mi intención de que hagamos eso es para que cada uno también pueda reflexionar cada vez que uno se para frente a una fotografía, cuánto compromiso uno esta poniendo, cuánta responsabilidad, cuánto trabajo, cuánto tiempo le estamos dando a la fotografía. Así como lo veo, es lo primero que me gusta hablar de nuestro oficio, luego viene el tema de las empresas, etc., pero básicamente somos fotógrafos. Tenemos una cámara, trabajamos con eso, y ahí una responsabilidad, una ética, una ideología. Uno puede alimentar una forma de vida con una cámara de fotos, u otra forma de vida. Yo cuando constato trabajos de esas profundidades y de ese tipo de compromiso, siento que mis horizontes se amplían y que crezco y siento todo lo que todavía puedo aprender y crecer. Esa es la idea, correr los horizontes un poco más hacia delante.

Luego hay un par de cosas más. Hay un documental de cuando mandaron a Eugene Smith a Inglaterra para cubrir las elecciones de conservadores y laboristas para la revista Life. Hay una cantidad de trabajos de él que no fueron publicados, ya que simpatizaba con los laboristas y no con los conservadores, como sí lo hacía el jefe. Es un video de la BBC muy interesante, que recorre los sitios por donde él estuvo. Después hay otro video donde se muestra un poco la revista que yo hago, la Dulce Equis Negra, que es un compendio de poesías, fotos y pensamientos. Los trabajos son pensamientos de los mismos fotógrafos. También tengo algunos trabajos míos que si hay tiempo, los vemos”.

En sí todo este conjunto de cosas, para mí, tienen una dirección. Yo no espero ninguna clase de bienestar para mi vida que venga de la manos del poder, que cuentan las cosas como ha ellos les conviene. Y siento que la puerta que nos abre la posibilidad de construir algunas alternativas a lo que está establecido, es la que nos lleva a nuestro interior, hacia nuestra propia imaginación y voluntad, de manera de encontrar la forma de inventar cosas. Así como están las cosas, está agotado. Siempre el poder se reedita y encuentra las formas de reinventarse. Este encuentro tiene la intención de reflexionar sobre éste tiempo, nuestra responsabilidad, nuestro compromiso, y también darnos las alas para volar sin depender tanto de los que tienen el poder, que ya sabemos lo que hacen con nuestras fotos, nuestras intenciones, nuestra propia vocación, con nuestra propia relación con la fotografía, etc.

En los textos que les dieron hay uno que les di yo que se llama “El Arte como ansía de lo ideal”. En este texto están buena parte de los pensamientos de Tarkovski relacionados al trabajo creativo. Lo siento totalmente ligado a nuestra profesión, de alguna manera puede ser alimento a la hora de mirar nuestras fotos y confrontar con lo que queremos decir, qué vida queremos alimentar con lo que hacemos.

Aquí podemos contrastar con trabajos que fueron hechos con un grado de compromiso y de acercamiento a la relación que yo pienso que cada uno debiera tender a conseguir con la fotografía y con el tema que elige trabajar. Y aún mismo cuando trabajamos en un medio de comunicación, el grado de responsabilidad cuando involucramos el dolor de otras personas. Que sucede con nuestro trabajo, en las manos de los medios de comunicación, qué dirección final toma nuestro trabajo y que compromiso quisieramos asumir para con nuestro trabajo. Mi fe está en la imaginación, en la posibilidad de que inventemos nuevas formas.

Desde mi experiencia, la revista que hago tiene que ver exclusivamente con imaginarla, soñarla, como decia Tarkovski, un buen sueño puede mover las cosas, una buena dirección, la confianza y la voluntad para sostenerlo puede hacernos hacer cosas que ni imaginamos hoy que las podemos hacer. En esa mesita tienen revistas para ver, son muestras de expresiones independientes de Nicaragua, Cuba, Uruguay, gente que se propone hacer algo y lo hace, en la vocación de que no están cómodos con lo que los medios hacen con nuestro esfuerzo, con nuestra confianza, con nuestra creencia. La mexicana Luna Córnea, es muy seria, con un nivel de investigación que está financiado por el Estado, pero su construcción es independiente. Es un grupo de investigadores, historiadores y fotógrafos que la hacen a su propio antojo. Los textos del video son de Sergio Larraín, fotógrafo chileno”.

Entre los textos que les hay un texto de Susan Sontag, que está referido a nuestro trabajo y al dolor de las fotos que hacemos y que muchas veces nos toca enfrentar. Ella tiene una posición frente a este tipo de imágenes, donde cuestiona la cultura del consumo y el espectáculo con la imagen del dolor de otros. Es un articulo del libro “Ante el dolor de los demás” que habla de un libro de fotografías que se publicó después de la guerra mundial, que parece que es una recopilación muy profunda de imágenes, que hay imágenes de torturas, de asesinatos de soldados estadounidenses en una isla en manos de japoneses, que ni siquiera se tenia noticias de ese episodio. El libro fue muy celebrado por los intelectuales de ese momento, se decía que frente a la constatación del dolor, del sufrimiento, la degradación que produce la guerra, el hombre ya no iba a incurrir en esta cuestión. Y termina el articulo diciendo, al año siguiente estalló la segunda guerra mundial. Da respaldo a su teoría que esas imágenes en los medios de comunicación no cumplen el resultado de modificar el destino de la humanidad.

Sé que compartir estas cosas exige más tiempo, que podamos después hacer un correlato con nuestras fotos y nuestras experiencias, pero hacemos el intento en este tiempo.”

Ojalá les sirva de algo la reflexión sobre como nos relacionamos con las cosas, son tiempos para tomarnos las cosas profundas y seriamente. En este caso, la fotografía es la excusa que nos trae acá, pero básicamente es la totalidad de nuestra vida.

*Fragmentos del desgrabado del taller coordinado por Marcos Adandía el viernes 8 de abril de 2011 a la tarde, en el marco del 1 Encuentro Nacional de Reporteros Gráficos en Chapdmalal.